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Los padres de Matías Berardi se mostraron contentos con el trabajo del juez y los fiscales, pero pidieron «que se investigue por qué se escapó». 

Los padres de Matías Berardi, el estudiante asesinado en un secuestro ocurrido en septiembre de 2010, pidieron hoy que Gabriel «Larry» Figueroa, uno de los condenados por el crimen que fue recapturado en las últimas horas, sea trasladado a «otra cárcel de máxima seguridad».

«Anoche me llamó el juez para avisarme de la recaptura. Lo detuvieron en José C. Paz, estaba armado, lo tiene la DDI de Pilar», dijo la madre de la víctima, María Inés Daverio, sobre el detenido, quien se había fugado del penal de Marcos Paz en la madrugada del domingo 25 de enero.

Figueroa, de 28 años, se evadió junto a Luciano Campos, quien ya se había escapado de la cárcel de Ezeiza en agosto de 2013 y fue recapturado la semana pasada. Esta mañana, Daverio dijo al canal C5N que Figueroa «es un tipo muy peligroso» y los policías que lo buscaban «estaban preocupados porque era capaz de cualquier cosa».

Respecto de la fuga, la mujer dijo estar «convencida» de que «tuvo que haber habido algún tipo de complicidad» por parte de quienes lo vigilaban en el penal. Por ello, reveló que habló en las últimas horas con autoridades penitenciarias para plantear «la posibilidad de que lo cambien a otra cárcel de máxima seguridad».

Por su parte, el papá de Matías, Juan Pablo Berardi, habló con Dady Brieva por Radio América y dijo que están “contentos porque esta vez funcionaron las instituciones” y describió como “impecable” el trabajo del juez y los fiscales.

No obstante, coincidió con su mujer en que «no cierra» que nadie haya visto que se estaban escapando de la cárcel cuando pasaron frente a torres de vigía. “Que tengan la posibilidad de salir hace que se venga abajo el trabajo de fiscales y jueces. Se viene el alma al suelo, más que lo que uno ya lo tiene”, sostuvo.

El detenido estaba en Marcos Paz cumpliendo una condena de prisión perpetua por el secuestro y asesinato de Berardi. Tras huir del penal, junto a Campos se metieron en la casa de un country de Cañuelas y allí retuvieron a una pareja y sus hijas casi cinco horas.

Para escaparse de la cárcel, se «lubricaron» el cuerpo con crema, jabón o vaselina para poder pasar entre los barrotes de una ventana, aprovechando un supuesto descuido de los guardias que veían por televisión el partido Boca-River en Mar del Plata.

Berardi, de 16 años, fue secuestrado en la mañana del 28 de setiembre de 2010 en el cruce de ruta 26 y Panamericana, en Ingeniero Maschwitz, luego de bajarse de una combi cuando regresaba de una fiesta de egresados en Capital Federal.

El chico, mientras los secuestradores negociaban con su familia el rescate, se escapó y luego de ser recapturado fue asesinado de dos balazos en un descampado próximo a la ruta 6, cerca de Campana.

Fuente: Infobae