Tierra de nadie: crecen las denuncias por inseguridad en el Camino del Buen Ayre

El fin de semana un joven terminó internado con graves heridas luego de que intentaran robarle su moto. Son varias las personas que sufrieron hechos similares



No Banner to display

El fin de semana un joven terminó internado con graves heridas luego de que intentaran robarle su moto. Son varias las personas que sufrieron hechos similares




Atravesar los 23 kilómetros de la autopista del Buen Ayre se transformó en los últimos tiempos en una riesgosa aventura. El camino está en mal estado, hay tramos donde falla la iluminación y cada vez hay más denuncias por hechos de inseguridad.

Tomás García es un joven de 20 años que volvía a su casa luego de practicar boxeo. Se trasladaba en moto y tenía el casco puesto. A la altura del poste 150, en la localidad de Billinghurst, en el partido de San Martín, cayó del vehículo y tuvo que ser trasladado con heridas graves, entre las que figura una doble fractura de mandíbula.

No fue un accidente. García perdió el control de su moto luego de que una piedra impactara en su casco. El proyectil fue lanzado por ladrones que pretendían robarle la moto y el resto de sus pertenencias, según denunció la familia.

La Policía dice que la versión «no está certificada», pero el relato coincide con el de numerosos conductores que denunciaron hechos similares en el Camino del Buen Ayre. Allí los hechos de inseguridad son habituales. La autopista está rodeada de asentamientos, no hay alambrados y los patrulleros que están estacionados al costado del camino están vacíos. De noche les encienden las sirenas, pero en su interior no hay nadie. Los delincuentes de la zona ya lo saben y actúan libremente.

Gustavo Núñez es otro conductor que sufrió un hecho similar. Tiempo atrás transitaba por la autopista cuando fue impactado por otra piedra. Se asustó pero no frenó la marcha de su vehículo porque sabía que podía tratarse de un intento de robo. Cuando llegó a la estación de servicio más cercana, reportó el hecho a la Policía, pero le dijeron que no podían hacer nada. Lo mandaron a la comisaría.

Cuando Núñez intentó realizar la denuncia en la comisaría más cercana, le dijeron que no tenían competencia y lo mandaron a Tres de Febrero. Ahora deambula en los pasillos de Tribunales buscando una respuesta.

«Hablé con la abogada de la autopista y me dijo que la política de la empresa es no pagar por los reclamos de los usuarios. Yo ahora voy a iniciar acciones legales, porque lo que le pasó a este muchacho es exactamente igual a lo que me pasó a mí; además si roban, la actividad es rentable y esto se va a hacer mucho más frecuente», repasó Núñez.

Infobae transitó el Camino del Buen Ayre el sábado 29 de noviembre. El estado del camino es calamitoso y la mayoría de la traza está sin luz. Con la lluvia que había caído en aquella jornada, gran parte de la autopista estaba inundada y no se advertía la presencia de empleados de la concesionaria o de efectivos policiales para dirigir el tránsito.

Cada vez son menos los automovilistas que transitan el Camino del Buen Ayre porque las historias sobre robos y otros hechos de inseguridad durante la noche son frecuentes. Eso sí, los que se animan a tomar ese camino durante la noche están obligados a pagar los $20 de peaje, uno de los más altos de la red de autopistas del área metropolitana.

Fuente: Infobae

Publicado en: Sociedad   Etiquetas: , , ,


Articulos relacionados