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Mientras intentan determinar si el accidente fue intencional, se conoció que Lubitz debió suspender su entrenamiento como piloto afectado por el síndrome de Burnout.

El copiloto del avión de Germanwings, que según la fiscalía de Marsella provocó la caída del Airbus en los Alpes franceses, había suspendido su entrenamiento como piloto por estar afectado por el «síndrome de Burnout, una depresión», sostuvo el diario alemán Faz en su portal de Internet.

El diario presentó el reporte citando a la madre de una amiga de la infancia de Andreas Lubitz. «Era un buen muchacho, de buena familia», afirmó la mujer, mientras a su lado lloraba la hija.

La muchacha, al parecer, vio a su amigo por última vez para la Navidad pasada y le dio una impresión «normal».

El accidente «no puede ser planificado», agregó. Carsten Spohr, el presidente de Lufthansa, no había dado precisiones sobre los motivos del retiro del joven del adiestramiento por motivos de reserva.

Fuente: Infonews