Los vecinos perjudicados, quienes debieron cerrar sus locales por este brote, buscan un resarcimiento económico por parte de los responsables de la propagación del virus a nivel local. “Muchos comerciantes que habían transitado duramente las diferentes fases del aislamiento había podido lograr la reapertura de sus comercios para poder sobrellevar los altos costos que requiere tener una actividad comercial funcionando en una situación de país muy delicada”, le explicó al diario local Cuatro Vientos, Eduardo Caballero, el abogado que los representa.
Se trata de un grupo importante de comerciantes de diferentes rubros cuyas actividades se vieron perjudicadas debido al retroceso que debió establecer el intendente local por la realización del baby shower en cuestión.
Para poder llevar adelante la acción por daños y perjuicios, se necesita la documentación oficial firmada por funcionarios que integran la Mesa Local de Emergencia Sanitaria, por lo que la defensa avanza en los trámites necesarios para poder personalizar las demandas.
Ayer a la mañana los comerciantes se manifestaron con un bocinazo en caravana a la Municipalidad donde el intendente Arturo Rojas los recibió en la calle y se reunieron en el Salón de Actos del Palacio Municipal manteniendo el debido distanciamiento social.
Cabe destacar que hasta la realización de este evento, y su consecuente propagación del virus, Necochea llevaba dos meses sin casos locales. «Nosotros creemos que estamos controlando este foco. Pusimos a 150 personas en aislamiento estricto. Pero recién en 14 días vamos a saber si cortamos este brote o no«, concluyó la secretaria de Salud, Ruth Kalle.
A su vez, Kalle indicó que desde el Sistema Integrado de Vigilancia Epidemiológica se informó el resultado negativo de otros 38 testeos, entre ellos el de una mujer que ayer había informado que, cuatro días después de asistir al «baby shower», había recibido a varias personas en su domicilio por su cumpleaños.
La comuna informó además que 74 vecinos ingresaron en aislamiento preventivo y obligatorio, por lo que en total hay «370 personas aisladas, asintomáticas y monitoreadas por el sistema de vigilancia, con seguimiento telefónico y personalizado de profesionales médicos las 24 horas».
Fuente: Ámbito