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El Banco Mundial tiene en carpeta la aprobación de nuevos créditos para la Argentina por 2.000 millones de dólares, que se podrían efectivizar a partir del año fiscal que arranca en julio próximo.

Así lo confirmó el director del organismo para la Argentina, Paraguay y Uruguay, Jesko Hentschel, quien explicó que el direccionamiento de los créditos se definieron luego de las reuniones que los representantes de la entidad, incluido, el titular, Jim Kim, mantuvieron en Washington, con la delegación argentina encabezada por el ministro de Hacienda, Alfonso Prat Gay, que participó hace quince días de la Asamblea de Primavera (boreal) del FMI y el Banco Mundial.

Estos nuevos préstamos son parte de las estrategia vigente plurianual que el BM tiene con el país, por un monto total de alrededor de 4500 millones de dólares, que está siendo reformulado en base a las necesidades de la nuevas gestión, y de los cuales ya se aprobaron 1500 millones de dólares durante la administración de Cristina Fernández de Kirchner.

El primer crédito, y uno de los más importantes, será para ayudar a ampliar el alcance a la Asignación Universal Por Hijo y demandará unos 600 millones de dólares, que podría ser aprobado en julio próximo.

El acuerdo por este crédito fue anunciado por el presidente Mauricio Macri a mediados de marzo último, en Chaco, donde expresó que la ampliación de la AUH “no sirve solamente para repartir dinero sino que es muy importante que entendamos qué pasa con todo el grupo familiar y cómo ayudarlos a incluirse y poder tener ese futuro que todos soñamos compartir.”

Durante la rueda de prensa, Hentschel estuvo acompañado por el resto del equipo del banco que trabaja con el país: Rafael Rofman, Julian Lampietti, y el economista jefe, Zafer Mustafaoglu.

Respecto del crédito que ampliará el financiamiento al programa de la AUH, Rofman explicó que en esta etapa se focalizarán en empadronar a 1,5 millones de chicos sobre los que la Anses no posee información completa acerca de los padres, y por lo tanto estos chicos hoy no gozan de ese beneficio.

«El tema es arreglar esa información para que los chicos sean evaluados. No sabemos cuántos de ellos serán elegibles, pero todo indica que mayoría va a terminar cobrándola», expresó el experto en temas laborales, quien indicó que existe un «trabajo duro con los registros civiles y municipalidades, completar información.

En lo que respecta a los desembolsos del organismo, «estamos otorgando en 600 y 700 millones de dólares por año, y la expectativa es aumentar los giros de dinero», y ubicarlos en un «nivel histórico» promedio de 1.000 millones de dólares anuales, expresaron desde el banco.

Al respecto, puntualizaron sobre «grandes programas existentes que son viejos pero siguen vigentes», como el proyecto Matanza-Riachuelo, donde el BM se comprometió a desembolsar unos 700 millones de dólares, y aún faltan más de 500 millones de dólares.

«Históricamente estuvimos hasta 1000 millones de dólares pero depende mucho del tipo de proyecto. En los 90 trabajábamos con préstamos de soporte presupuestario -los famosos créditos de ajuste-, que no requerían contrapartida del país, si bien el banco para la Argentina no lo otorga actualmente», Hentschel.

Todos los créditos que otorga el Banco Mundial al país en la actualidad son de inversión y, en consecuencia, necesitan también de la contrapartida nacional y de eventuales controles de ejecución, para avanzar.

Asimismo, Hentschel expresó que hay dos programas piloto, uno para financiar el fondo de energías renovables y otro para otorgar financiamiento a las pymes a través del BICE y los bancos privados, por 100 millones de dólares y 50 millones de dólares, respectivamente, con expectativas de ampliar esos montos.

En total, Argentina tiene 23 proyectos vigentes con el banco, que totalizan casi 6000 millones de dólares, y de esa cartera restan aún 2650 millones para desembolsar, es decir, un 45% de la cartera activa total.

El grueso de los programas que financia el Banco Mundial en el país se reparten en un 47,5% de salud, un 30% en medio ambiente, un 6% en agricultura, casi un 5% en educación, entre las mayores áreas, en base a los tres pilares de la estrategia de las entidad con el país, que son, la disminución de la pobreza, el empleo sustentable, y la protección al medio ambientes y recursos naturales.

Además de los créditos, el Banco trabaja con la Argentina en la vertientes de asistencia técnica y difusión de estudios. Al respecto, en breve lanzará un estudio sobre la polución en ciudades de América Latina, en donde se detectó que la medida de costo de la polución urbana para la Argentina es de 3,4% del PBI.

Fuente: Telam.com.ar