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David Mueller, antiguo locutor y DJ de radio de Colorado, Estados Unidos, fue a un concierto de la cantante norteamericana en junio de 2013 junto a su novia y compañera de trabajo, y luego se tomó una fotografía con ella.

En este contexto, Swift se quejó de que Mueller le había levantado «la falda con las manos y le había tocado el trasero».

Después del episodio, el equipo de la estrella lo denunció a la dirección de la estación KYGO, que decidió despedirlo, según rezan los documentos legales. Sin embargo, el insiste en su inocencia y presentó la foto que tiene con ella de ese momento como medio de prueba.