Mundial del agua: Los chicos que quieren recuperar los arroyos porteños

Tres estudiantes de San Martín llevarán a Estocolmo su propuesta para descontaminar los canales entubados



No Banner to display

Tres estudiantes de San Martín llevarán a Estocolmo su propuesta para descontaminar los canales entubados




Hay otro Mundial, sin pelota de fútbol ni copa dorada. Un Mundial que premia el esfuerzo y el trabajo para cuidar los recursos de nuestro planeta. El Mundial Juvenil del Agua, que se hará en Estocolmo, Suecia, y en el que participará un grupo de jóvenes estudiantes de la Escuela Técnica N° 2, de San Martín, en el Gran Buenos Aires.

Estos alumnos fueron seleccionados luego de que presentaran un proyecto tan ambicioso que cuesta creerlo: desarrollaron una fórmula para sanear los arroyos entubados del Río de la Plata.

Elegidos por la Asociación Argentina de Ingeniería Sanitaria y Ciencias del Ambiente, los jóvenes aún buscan recursos para solventar los pasajes aéreos para ir al Stockholm Junior Water Prize, en septiembre próximo. Los tres jóvenes científicos -Daniel Gramajo, de 18 años; Julián Zuñiga, de 19, y Ezequiel Solís, de 18- forman un equipo junto con su profesor, Raúl Carnero, y el director, Omar Alarcón.

Juntos idearon el proyecto denominado «Electrofotocatálisis, una propuesta tecnológica para el tratamiento de los vertidos de arroyos entubados en el Río de la Plata». Es un trabajo original, desarrollado por este seleccionado de jóvenes alumnos de la carrera Tecnología en Alimentos para descontaminar el agua mediante la utilización de electroquímicos en combinación con metodologías fotocatalíticas.

Se trata de un proyecto de alta dedicación, que no sólo incluye trabajo de laboratorio, sino que requiere buen conocimiento de inglés, ya que los estudiantes deben exponer en ese idioma en Estocolmo.

Los alumnos de esta escuela técnica de San Martín se prepararon durante meses para enfrentar esta experiencia. El proceso electrofotocatalítico fue ensayado con efluentes reales de arroyos entubados, con toma de muestras de agua en los arroyos Vega, Medrano y Maldonado, de la ciudad de Buenos Aires.

Unos bidones con esa agua oscura de la ciudad fueron trasladados desde los arroyos hasta el laboratorio de la escuela Alemania. Allí, los integrantes del equipo seleccionado recibieron a LA NACION.

«Los chicos plantearon una alternativa para disminuir los contaminantes que se descargan en el Río de la Plata desde unos 52 arroyos entubados de toda la provincia», explicó el profesor Raúl Carnero.

Y agregó: «La contaminación es muy alta. Esto va a hacer imposible consumir agua del río de acá a unos diez años. La idea es generar una propuesta tecnológica para disminuir los contaminantes mediante un proceso moderno de activación de oxígeno e hidrógeno por luz ultravioleta».

Alarcón agregó: «Concluimos que el tratamiento de los efluentes se puede remediar con una instalación medianamente económica. De este modo, podemos contribuir a la salud presente y futura de la población de la Capital Federal y el Gran Buenos Aires, y a la limpieza de los arroyos».

«Es una variante que no se ha experimentado antes. Hemos llegado a resultados fiables para instalar estas plantas en las desembocaduras de los arroyos», aseguró Carnero. «La idea es que el agua, al fluir por las plantas que nosotros fabricamos, salga tratada con los parámetros que buscamos», puntualizó Solís.

«Queremos abordar una solución para ayudar a las personas a mejorar su calidad de vida», dijo Zuñiga. Y Gramajo: «Nuestra idea es aportar al cuidado del medio ambiente. Queríamos llegar a una solución real a este problema y luego surgió la posibilidad de exponer el proyecto en Estocolmo».

Lo cierto es que dos de los estudiantes ya viajaron el año pasado al Mundial Juvenil del Agua de Suecia. Presentaron una propuesta denominada «Avances tecnológicos para el tratamiento de efluentes industriales», pero no lograron el primer premio.

Este año se proponen representar a la Argentina de un modo más completo: no sólo expondrán ante el jurado un proyecto innovador, sino que irán a una de las ceremonias protocolares del certamen vestidos con prendas gauchas, para que se identifique su hallazgo con el país de origen.

En caso de ganar el premio instituido por la Fundación Estocolmo del Agua, tendrán que saludar a la princesa Victoria de Suecia, patrocinadora del certamen.

Mientras esperan reunir el dinero que les falta para dos de los pasajes del equipo, se concentran en la exposición de su invento.

Ellos ya ganaron el Premio Argentino Junior del Agua, otorgado por la Asociación Argentina de Ingeniería Sanitaria y Ciencias del Ambiente. Este concurso se hace todos los años en nuestro país desde 1999. Su propósito es captar la atención de los jóvenes y desarrollar el interés en la conservación, protección y administración del agua a través de la generación de proyectos en los campos tecnológico, científico y de comunicación. En la edición 2014 se presentaron 14 trabajos de estudiantes de Buenos Aires, Mendoza, Bahía Blanca, Santa Fe, San Pedro, San Juan, Río Negro y Capital Federal. Entre todos estos jóvenes fueron reconocidos los noveles científicos del conurbano bonaerense.

Fuente: Lanacion.com