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El arzobispo porteño bendijo el pesebre navideño de la Plaza del Vaticano con la presencia del jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri. Además, pidió que la Navidad sea «un momento de encuentro entre todos»

El Arzobispo de Buenos Aires, monseñor Mario Poli, bendijo el Pesebre Navideño de la Plaza del Vaticano y pidió que esta fiesta de la cristiandad «sea realmente un momento de encuentro entre todos». Al bendecir el Pesebre, el cardenal Poli felicitó la iniciativa promovida por el Banco Ciudad y Fundaleu e hizo una breve referencia al nacimiento de Jesús que marcó el itinerario de la era Cristiana.

Ante la presencia de autoridades del Banco Ciudad y Fundaleu, Macri coincidió en que «la Navidad nos lleva a reunirnos con los afectos y a compartir año a año, desde el amor, algo tan importante en la vida de los argentinos. Felicidades a todos y que con amor y alegría recarguemos baterías para seguir en la reconstrucción de la Argentina que todos queremos».

Poli bendijo la imagen que está ubicada junto al Árbol de Navidad de 40 metros de altura que montaron el Banco Ciudad y Fundaleu como parte de la campaña «Una Estrella x una Sonrisa» en favor de la lucha contra la leucemia, en la que cada persona que done podrá obtener una estrella con su nombre y colocarla en el Árbol, junto a otra estrella que fue bendecida por el Papa Francisco en el Vaticano el pasado 10 de diciembre.

Continuando con una tradición iniciada por Jorge Mario Bergoglio cuando era Arzobispo de Buenos Aires, el Cardenal Poli saludó a los argentinos con motivo de la Navidad, invitando a recibir al Niño Jesús con un corazón dispuesto como un pesebre, con un hogar convertido en la gruta de Belén, porque el Señor «viene a alegrar la vida de todos».

El arzobispo de Buenos Aires y Primado de la Argentina expresa en su mensaje que la Navidad «nos trae siempre un mensaje de esperanza», y para recibirlo, sencillamente, «cada corazón tiene que convertirse en un pesebre, y cada casa, en una gruta de Belén».

«Los invito a recibir en familia al Niño Jesús, porque Él viene a alegrar la vida de todos», concluyó el Purpurado.

Fuente: Minuto Uno