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Nephtali Cuellar trabaja como inspector y la empresa lo sancionó por 10 días tras denunciar el mal servicio que brinda la empresa.

El hombre se desempeñaba como inspector y también venía realizando un relevamiento por el mal servicio que la empresa brinda. Luego de constatar que la poca frecuencia de unidades en la calle era alevosa, procedió a realizar las denuncias correspondientes por las cuales la empresa lo suspendió 10 días.

La empresa está en conflicto con los trabajadores y el Ministerio de Trabajo dictaminó una conciliación obligatoria que violó tras sancionar al empleado.

Según denuncia la agrupación Al Volante, DOTA recibe actualmente, solo por la línea 60, $95.000 por unidad por mes, lo que da un total de 32 millones de pesos.

Ese dinero no lo utiliza en mejorar el servicio, por el contrario, al tener ganancia subsidiada, prefieren dejar los colectivos parados dando el peor servicio de los últimos 20 años.

En horario normal tendrían que salir 36 unidades y salen menos de 19. Hecho que perjudica tanto a pasajeros como al trabajadores.

«La empresa DOTA ha vaciado los recorridos tradicionales de la línea 60 perjudicando a los pasajeros y los deja esperando alrededor de una hora. Por los usuarios y por los compañeros de trabajo me encadené», dijo el trabajador suspendido.

Nephtali Cuellar, luego de enterarse de la suspensión, se presentó a trabajar. Al negársele el servicio decidió, asamblea por medio, encadenarse a un colectivo en señal de protesta por el tiempo que dure su suspensión.

Los trabajadores de la Línea 60, la agrupación Al Volante como el cuerpo de delegados, están en estado de asamblea permanente y no descartan futuras medidas de fuerza.

Fuente: minutouno.com