Uribe, de 68 años, fue presidente de Colombia por dos períodos consecutivos entre 2002 y 2010 (una novedad para el país), y fue el encargado de designar a su propio sucesor, Juan Manuel Santos, con quien hoy está enfrentado políticamente. Luego apadrinó al actual mandatario, Iván Duque, y desde 2014 ocupa una banca en el Senado por el partido Centro Democrático, que él fundó.
Uribe declaró el 8 de octubre de 2019 ante la Corte Suprema de Justicia para una indagatoria por un proceso abierto en su contra por presunto fraude procesal y soborno de testigos, un caso que podría hacerlo perder sus fueros de senador.
El caso por el que será indagado Uribe se remonta a 2012, cuando denunció al senador del partido de izquierda Polo Democrático Alternativo Iván Cepeda por el presunto uso de falsos testigos al acusarlo de buscar a ex paramilitares en las cárceles y convencerlos para que declararan en su contra. Según algunos de los polémicos testigos del caso, Uribe y su hermano Santiago ayudaron a fundar en los años 90 el Bloque Metro de las paramilitares Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), informa la agencia de noticias EFE.
Uribe acusó a Cepeda, pero el entonces Magistrado Auxiliar de la Sala Penal de Colombia, José Luis Barceló, decidió archivar en febrero de 2018 la denuncia, y consideró que había elementos para abrir una investigación al ex mandatario por supuesta manipulación de testigos contra el senador de izquierda.
La estrategia de Uribe se convirtió, entonces, en un búmeran en su contra, y ahora deber responder a un proceso penal en la Corte Suprema de Justicia, un caso único en Colombia.