No Banner to display

Los camioneros, que están en huelga, buscan que los precios de los combustibles no aumente al menos en los próximos seis meses y exigen que baje el costo de los peajes.

Se acentuó la escasez de alimentos y combustible en Brasil hoy, cuando se cumplen 10 días de haberse iniciado las protestas de los camioneros, que han bloqueado decenas de autopistas en todo el país en su afán de exigir al Gobierno que los precios de los combustibles no aumenten por lo menos en los próximos seis meses y que baje el costo de los peajes.

Pese a un acuerdo que, el pasado miércoles, lograron el Gobierno y los sindicatos de camioneros, hoy continuaron las huelgas en varias carreteras de los estados de Paraná, Río Grande do Sul, Santa Catarina, Ceará y Bahía.

La Policía comenzó a multar y arrestar a manifestantes, con lo que se consiguió erradicar 29 bloqueos, pues de los 88 registrados hasta ayer, hoy se reportaron 59. Sin embargo, los organizadores de las protestas aseguraron que no tenían planes de poner fin a la medida de fuerza.

La protestas ha afectado especialmente la distribución de carne, aves y productos lácteos, y obliga a algunos productores a parar sus cosechadoras por falta de combustible. La huelga también está demorando la entrega de bienes y materias primas a lo largo del país.

Las imágenes difundidas por la red Globo TV muestran a los productores de lácteos desparramando la leche en las carreteras al no poder llevar sus productos al mercado.

En su afán de evitar mayores afectaciones, el Gobierno de Dilma Rousseff firmó un acuerdo junto con los sindicatos de camioneros el pasado miércoles. El problema es que, según el ministro de Justicia, José Eduardo Cardozo, aproximadamente la mitad de los más de dos millones de camioneros en Brasil no están sindicalizados y son quienes continúan la huelga.

Cardozo agregó que los camioneros que sigan bloqueando las carreteras serán multados por hasta 10.000 reales (3.500 dólares).

Fuente: La Nación