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Un grupo de milicianos rebeldes ha matado al menos a diez policías en Grozni, capital de Chechenia, según informan fuentes oficiales rusas, y posteriormente se ha atrincherado en la Casa de la Prensa local tras el enfrentamiento. 

Posteriormente, según el líder checheno Ramzan Kadírov, las fuerzas de seguridad han rodeado el edificio y matado a seis de los combatientes separatistas. Al menos otras 28 personas han resultado heridas en la confrontación, según recoge la agencia France Presse.

«Ahora están bloqueados [los milicianos] y se lleva a cabo una operación para eliminarlos», ha explicado Kadírov a las agencias rusas. El líder publicó además en su cuenta de Instagram el siguiente mensaje: «Seis terroristas ya han sido eliminados en la Casa de la Prensa. Ni un solo bandido ha podido escapar. Yo dirijo la operación personalmente».

El enfrentamiento, que según Kadírov se inició cuando los agentes trataron de cortar el paso a varios vehículos armados de los milicianos por el centro de Grozni, se produce el día en que el presidente ruso Vladimir Putin comparece en el Parlamento para dar el discurso sobre el estado de la nación.

El pasado octubre un miliciano ya mató a cinco policías y dejó al menos 12 heridos en un ataque suicida en Grozni. Los separatistas musulmanes, menos activos en los últimos años tras la política antiterrorista impulsada por Kadírov, han combatido por la independencia en dos guerras contra las fuerzas rusas desde 1991, cuando se produjo la desintegración de la Unión Soviética.

Fuente: El País