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«Esta causa armada puede terminar con un kilo de droga en mi auto, con una amenaza más fuerte o con un tiro». El fiscal federal Federico Delgado denunció ayer que sufrió una serie de persecuciones a raíz de la causa que investigó la muerte de cinco jóvenes en la discoteca Time Warp, lo que incluyó -sostiene- el «armado» de una causa en su contra por la supuesta filtración de información.
«Mi trabajo fue, como siempre, tratar de armar el caso y presentárselo al juez. (Sebastián) Casanello nos dio la razón. Y por alguna razón extraña nos tiraron por la ventana a Casanello y a mi, y yo sufrí una serie de persecuciones que ahora terminan con la causa armada y que puede terminar con un kilo de droga en mi auto, en una amenaza mas fuerte o en un tiro. No sé cómo puede terminar porque el proceso de dos años se ha ido agudizando», afirmó Delgado en una entrevista con el canal Todo Noticias.
Delgado fue citado a declarar como acusado por el juez Marcelo Martínez de Giorgi en una investigación por la supuesta difusión de información sensible del caso Time Warp cuando ese expediente estaba bajo secreto de sumario.
El fiscal había sido el primero en intervenir en la causa que investiga la muerte de los jóvenes en la fiesta electrónica en abril de 2016, pero luego fue desplazado del caso después de que lo recusaran dos imputados vinculados a la organización del evento: el abogado Víctor Stinfale (que estuvo detenido) y el empresario Walter Santángelo.
El fiscal también había sido denunciado por el empresario Jorge «Corcho» Rodríguez, acusado de ser intermediario para el pago de sobornos en el caso Odebrecht.»Mis problemas aumentaron en la causa Odebrecht, donde descubrimos un mecanismo por el cual dinero sucio venia de Brasil, pasaba por Uruguay y llegaba a la plana mayor del anterior gobierno. En esa semana recibimos cuatro denuncias penales, un récord, siempre por lo mismo, por trabajar, nunca por una coima o tráfico de influencias o por haber comprado una máquina para hacer papel moneda», dijo Delgado.
Fuente: La Nación
