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El régimen de licencia por paternidad dio, este jueves, un contundente paso al frente, luego de que la Legislatura porteña aprobara sobre el mediodía una serie de medidas que permitirán a los empleados de dependencias públicas de la Ciudad de Buenos Aires una organización familiar completamente novedosa en comparación al histórico funcionamiento doméstico del postparto y el primer año de vida de los bebés.
En el panel no se registró el voto del diputado Penacca, con lo que fueron 59 positivos y una ausencia.
Los puntos centrales votados son que la licencia por paternidad pasará de los 10 o 12 días actuales a 15, más otros 30 (corridos y remunerados), que la persona podrá tomar durante el primer año de vida del bebé.
Además, la madre, si también es empleada pública porteña, podrá transferirle el último mes de licencia por postparto al padre, lo que elevaría el máximo de licencia por paternidad a 75 días. Cabe aclarar que, en los papeles —siguiendo los cambios del Nuevo Código Civil—, la nueva norma no habla de “padre» y «madre» sino de “persona gestante» y «segundo progenitor», o sólo «progenitores», en los casos de adopción.
Hijo y papá, un vínculo igual de importante que el establecido entre la madre y el bebé.
Además, se aprobaron cambios en temas que son esenciales en la vida familiar, como las licencias por adopción para ambos progenitores, las horas disponibles para la lactancia (en el caso de las mujeres policías) y el tiempo para asistir a los actos escolares.
En cuanto a la adopción, se busca mejorar los tiempos de vinculación en la adaptación de los chicos a la nueva familia. Se entiende que esos tiempos deben ser mayores cuando los chicos son más grandes. Por eso, la escala quedó así: si el niño tiene de 0 a 3 años, la licencia será de 90 días; si tiene de 3 a 6 años, de 120 días; de 6 a 10 años, 150 días; y de 10 a 18 años, 180 días.
Una de las modificaciones relevantes que se le hicieron al proyecto base fue un aumento en los tiempos de licencia en casos de violencia intrafamiliar y de género. Y otra novedad: las denuncias podrán hacerse no sólo en las dependencias judiciales sino en las administrativas relacionadas a estos temas.
“Muchas mujeres no quieren hacer una denuncia penal frente a casos de violencia de género y era importante escucharlas”, destacó, en diálogo con Clarín, Ariel Álvarez Palma, del bloque oficialista porteño Vamos Juntos.
Todos los cambios votados este jueves afectarán tanto a los incluidos en el régimen de empleo público de la Ciudad como a los trabajadores porteños de las áreas de Salud, Educación y Seguridad, ya que se modificarán las ordenanzas y estatutos que los regulan.
En un principio se pensaba que los diputados del partido Autodeterminación y Libertad (del dirigente de izquierda Luis Zamora) se abstendrían en la votación. Sin embargo, el apoyo a las nuevas normas fue unánime. Sectores del oficialismo y el Justicialismo destacaron a Clarín la importancia de la adhesión de ese y los demás bloques de izquierda.
De ahí la relevancia de esta votación, que en lo simbólico supera con creces al ámbito porteño, ya que sienta un precedente en la discusión que promete darse en el Congreso de la Nación cuando se le dé lugar a los proyectos en carpeta para responder a este reclamo histórico.
La imagen es de noviembre de 2016, cuando se debatía en el Senado un proyecto para extender la licencia por maternidad y paternidad (Charly Diaz Azcue – Comunicacion Senado).
«Esta ley apunta a la igualdad de derechos entre hombres y mujerespara que ambos estén al cuidado de sus hijos. Les permite a los padres tener más beneficios y mejora el desarrollo de los niños», dijo Diego Santilli, vicejefe de Gobierno de la Ciudad.
Si bien había casi veinte expedientes relacionados a las licencias de este tipo, el proyecto aprobado había sido presentado por el Jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, lo que de algún modo garantiza plazos más o menos rápidos en la reglamentación de estos cambios. Al respecto, el diputado justicialista Claudio Heredia afirmó que “sin dudas tendría que reglamentarse antes de que termine 2018”.
Por su parte, el legislador Álvarez Palma destacó que están “muy satisfechos”: “Si bien es un proyecto que entró el Jefe de Gobierno, había otros 19 expedientes y la verdad es que se incorporaron muchas cosas propuestas por la oposición. Para que adhiera la izquierda… es de imaginar que hubo mucho trabajo y que se obtuvo un gran consenso en pos de la igualdad de género”.
Heredia, desde la vereda política opuesta, opinó en la misma dirección: “Hubo un buen accionar de parte del oficialismo y se incorporaron un montón de modificaciones. Estos cambios van a ser un modelo. Con esta ley se va a poder mirar a la Ciudad de Buenos Aires como punta de lanza”.
Fuente: Clarìn
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