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El Tribunal Oral Federal 1 sobreseyó hoy al exvicepresidente Amado Boudou en el marco del juicio en su contra por la supuesta falsificación de documentos en la transferencia de un auto.

Al leer la sentencia, los jueces declararon «extinguida por prescripción de la acción penal» contra Boudou «en cuanto al hecho por el cual fuera acusado y en consecuencia sobreseerlo en dicho delito».

Horas antes de conocerse la sentencia, Boudou había asegurado que «nada» quiso «ocultar, ni esconder» durante la transferencia de un vehículo, ante lo cual pidió ser sobreseído en la causa.

«Voy a ser muy breve porque esta causa ya lleva casi ocho años, pero sobre todo por toda la prueba que se ventiló en este debate», comenzó su exposición el extitular del Senado, que ingresó a los Tribunales Federales de Comodoro Py por una puerta alternativa para evitar el contacto con la prensa.

Ante los jueces Gabriel Eduardo Vega, José Antonio Michilini y Adrián Grünberg, el dirigente se refirió a las presuntas irregularidades en la documentación de la transferencia del auto: «Nada quise ocultar, nada quise esconder, muy por el contrario».

«Ni en mi caso, ni en el caso de (su expareja) Agustina Seguin, ni insertamos, ni hicimos insertar, ni colaboramos para que se insertara ningún dato o ninguna cuestión falsa en ningún instrumento público», afirmó. Y agregó: «Lo único que yo quise fue que la situación registral de un automotor que yo poseo hace más de 20 años reflejara los hechos de la realidad».

En ese sentido, Boudou explicó que «lo que se buscó es que la situación registral fuera la misma que la de la tenencia, hecha a título oneroso y de buena fe» que goza «desde hace más de 20 años».

«Tanto los testimonios como las pericias caligráficas con contundencia marcan la realidad de los hechos y por eso respetuosamente y con mucha humildad pido que se me sobresea en esta causa y que finalmente quede demostrado que soy inocente», manifestó.

Y finalizó: «En definitiva, a partir de esta correlación entre la realidad y la situación registral queda demostrado que no hay ningún riesgo, ni perjuicio ni real, ni concreto, ni potencial hacia terceros por ningún acto que pueda serme imputado a mí o a la señora Seguin en toda esta causa».

Fuente: El Tribuno