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Ayer, el puertorriqueño hizo un impactante show solidario en Parque de la Ciudad, lleno de hits y temperatura

En un mes donde los cantantes latinos invadieron los estadios de Buenos Aires, anoche le tocó a Ricky Martin que, a comparación de Ricardo Arjona y Luis Miguel, vino a hacer un solo show solidario. Las entradas se canjeaban por pañales descartables y botellas para un posterior reciclado. En cuestión de horas se agotaron los tickets y los insumos serán repartidos a los distintos Centros de Primera Infancia de la Ciudad de Buenos Aires.

El show empezó pasadas las 19.30, miles de fanáticas gritaban histéricas al ver al intérprete moverse. [Hay que reconocer que tiene un don para el baile.] El Coca Cola in Concert había empezado horas antes con Banda de turistas y Lali Espósito.

Ricky, vestido con una remera ajustada y su típico peinado de sex symbol, arrancó bien arriba con «Come with me», siguió con » Shake Your Bon-Bon» y «Adrenalina». Y así de un momento a otro, el Parque de la Ciudad se había convertido en una pista bailable. Después vino el momento de los lentos, los que lo hicieron ser él… y llegó «su canción preferida», «Vuelve». Los celulares captaron la emoción de las fanáticas. Mientras Ricky entonaba las estrofas del inmortal tema, entre los alaridos que se apoderaban del aire.

Dentro de la puesta del show, hubo autos, fuegos artificiales, tarimas que se elevaron, pantallas leds, humo, y efecto de luces. Además, de unos bailarines capaces de hacer sorprendentes piruetas en el aire. El calor, poco importó, Ricky volvió a arremeter contra todos e hizo una versión en inglés de «Livin´la vida loca». El climax llegó a su punto máximo con la versión de «Dime que me quieres». Aunque también estuvieron » Tal vez» y «Te extraño, te olvido y te amo de nuevo» que enloquecieron a las fans. Las distintas remeras sudadas de Ricky (hizo varios cambios de vestuario) hacían poner más chillonas a sus chicas.

Además de retomar varios de sus éxitos y pasar del baile a la canción de amor, el puertorriqueño se convirtió en coach y dirigió a su público para bailar como él. Con miles de amagues, Ricky consiguió mantener a todos expectantes y, por supuesto, llegó el turno de «Fuego de noche, nieve de día», que es una de las canciones imprescindibles de su repertorio.

También cantó «María» y para terminar «La copa de la vida». Ahí sí que parecía que decía adiós, pero… Ricky volvió a salir e hizo otro ícono de su carrera, «A medio vivir».

Antes… el puertorriqueño recibió algunas chicas que consiguieron tener un momento a solas con él para sacarse una foto. Una de ellas, después de la efervescencia de haber estado cerca de su ídolo, tomó un pañuelo y lo pasó por su brazo para inmortalizar su sudor y gritó: «Sí, tengo la transpiración de Ricky». Como si se tratase del manto sagrado, guardó el pañuelo y se retiró.

Lali Espósito también es fan

La actriz devenida en cantante, Lali Espósito hizo su show horas antes que el boricua. Emocionada, subió una foto ¿cholula? donde se la puede ver junto a Ricky.»El lujo que me di! ¡Fue una locura! De lo que más me habló en ese ratito que me regaló @ricky_martin fue de la humildad. ¡Por eso es un número uno!», escribió Lali en Twitter y agregó: «Gracias @ricky_martin por tu generosidad, un placer conocerte».

Fuente: La Nacion