Carnaval en Argentina, la febril fiesta del verano

La agenda ya está diagramada en casi todo el país. Los imponentes cabezudos, desfiles de carrozas y las comparsas de perfil brasileño. Además, las murgas y tradiciones del Noroeste, entre chicha, harina y albahaca.



No Banner to display

La agenda ya está diagramada en casi todo el país. Los imponentes cabezudos, desfiles de carrozas y las comparsas de perfil brasileño. Además, las murgas y tradiciones del Noroeste, entre chicha, harina y albahaca.




Un sueño: subir a la punta del obelisco y devorar como una esponja la vista de Buenos Aires. El naranja del atardecer quizás sirva de paliativo visual, pero nada cambiará los cuarenta grados que incendian el asfalto porteño en verano. Por ahí, el estrellato nocturno -la manta negra que nunca luce tan genial en las metrópolis- refresque un poco la cabeza. Pero lo que seguro cambiará el aire denso de febrero será el Carnaval. Ya se siente.

Me acuerdo bien. A los chicos de la hiperinflación nos negaban el rey momo porque era muy caro. Teníamos el bombero loco, un consuelo digno, y cada tanto mangueábamos una bombita de agua de alguno que amarreteaba su bolsita. En el barrio o en la playa te las explotaban sin piedad y a cualquier hora. La gran guerra de los chicos.

Pero había que escuchar a los adultos rezongando por el carnaval perdido, ese festejo genuino, auténtico -desde ya, previo a la dictadura- que nos habíamos perdido las nuevas generaciones.

Algunos abuelos, incluso, hablaban en plural; «los carnavales», decían. Imaginamos que los de ellos habrán sido como los retrató Bioy Casares en El sueño de los héroes. No sé, pero algo de ese tiempo volvió.

Con sus reformas. Impresiona (tras las anteojeras de la porteñidad) que desde hace unos años vivenciamos un carnaval renato, claro, en la forma de las murgas.

¿Por qué negar los contrastes si la realidad es el pulóver que resulta de ese tejido? Digo que las murgas son brillo, color, música, alegría y el hedonismo más puro signado por los bombos. Pero mientras unos aman el estruendoso palpitar murguero, otros -con los balcones sensiblemente cercanos al centro de la fiesta- los observan con una paciencia de mecha corta.

Habría que recordar que la murga es un grito popular de resistencia, licuadora de estructuras, baile de monigote y cuerpo suelto; los músculos dirigidos al deseo. La murga es una raíz: se hizo grande y fuerte. Tiene historia pero no tiene edad. Bebés y ancianos con paso sincopado avanzan. Y la levita calzada. Las lentejuelas cosidas una por una. El maquillaje, rozagante.

En regiones como el Litoral, el Noroeste o Cuyo no saben de carnavales fallecidos ni renacidos. Los festejos y ceremonias estallan con vitalidad y emoción cada verano.

 

Enfrente, Uruguay nos escruta. Buscamos su aprobación. No los igualaremos, pero nos alcanza porque los corsos dieron vida al barrio. Volvió la espuma y los chicos corren empapados por la calle con la sonrisa de quien copó tierra prohibida.

Carnavalear es volver al origen. Y desde que son días feriados (esta vez, 16 y 17 de febrero) se disfruta más. Sabemos: quienes sienten el tronar vespertino como un yunque, no tardarán en sumarse a la fiesta. Hay que decidir dónde pasarla.

 

ENTRE RIOS

Alguna vez hay que ir: el carnaval de Gualeguaychú es una de las mayores fiestas del verano argentino. Es increíble, pero el corsódromo de la ciudad, para 30.000 personas, se llena. Y por supuesto que la fiesta ya comenzó (el 10/1). Este año, las comparsas (Mari Mari, Kamarr y Ara Yevi) harán homenajes a la mitología azteca y al papa Francisco.

Los sábados de enero y el 7, 14, 15, 16, 21 y 28/2, habrá desfiles con pases desde 180 pesos (chicos, 40). Además habrá un escenario en plaza Colón -con shows jueves y viernes- y la propuesta «Gualeguaychú es arte». Más ciudades a las que vale la pena ir en estas fechas son Victoria, Concepción del Uruguay, Gualeguay, Concordia, Santa Elena, Paraná y Chajarí (www.gualeguaychuturismo.com).

 

CORRIENTES

Se sabe que el Litoral es una de las regiones más intensas en materia de Carnaval. Y, de hecho, en la ciudad de Corrientes arranca muy pronto, el 23/1 (hasta el 16/2). A lo largo de la fiesta, que se llevará adelante los fines de semana y tendrá como núcleo al corsódromo Nolo Alías, desfilarán 25 agrupaciones. Tal vez por ser la Capital Nacional del Carnaval, lo cierto es que la propuesta de la capital correntina está destinada a noctámbulos en condiciones para disfrutar de mucho baile desde las 22 hasta las 5 de la mañana.

Otro destino correntino para tener en cuenta es Ituzaingó, con sus atractivas comparsas desfilando en el anfiteatro Salvador Sena. Es ideal para disfrutar de la fiesta a pasos del río Paraná (www.ciudaddecorrientes.gov.ar).

 

MISIONES

Estamos en el Noreste, así que la influencia brasileña es parte de la esencia carnavalera, en especial en las ciudades junto al río Uruguay: es el caso de San Javier, con su Carnaval del Alto Uruguay (30 y 31/1, y fines de semana de la primera quincena de febrero), y de Concepción de la Sierra, celebración muy recomendable el 31/1 y el 7 y 14/2.

Pero es San Ignacio la sede de los festejos de Misiones. La fecha fuerte es el 16/2. También puede sumarse Iguazú (6, 7, 13 y 14/2) y la capital, Posadas, el 6 y 7 y del 13 al 15/2: brillarán comparsas en los barrios Yohasa, Itaembé Miní y en el anfiteatro El Brete. Se suman destinos como Garupa, Candelaria, San José, Montecarlo, Jardín América y Oberá.

 

SANTA FE

Con música, baile y comparsas, la ciudad de Rosario es una excelente opción para vivir jornadas de Carnaval en familia. Habrá shows gratuitos en el anfiteatro Humberto de Nito y bailes en la Isla de los Inventos (¡con pista y todo!).

Algunos de los artistas previstos en la agenda son Cris Manzano y el grupo Safari, y Los Iracundos (16 y 17/2, desde las 21). Para los más inquietos habrá un concurso de disfraces de grandes y chicos. Y por supuesto, murgas, cabezudos y la clásica quema del Rey Momo, desde el 14 hasta el 17/2 (www.rosario.gov.ar).

 

CORDOBA

Todos saben que el plato fuerte de Carnaval en Córdoba ocurre en la localidad de Arias, al sureste de la provincia. Por supuesto la fiesta ya arrancó (ayer) y seguirá durante el verano. Los días para tomar nota mental son el 24 y 31/1, y en febrero, el 7 y del 14 al 16. Habrá desfiles de carrozas y comparsas, la elección de la reina y buenos espectáculos, con grupos como Banda XXI, Kapanga y Rally Barrionuevo. Además, un encuentro de autos antiguos, un «moto-encuentro» y algunas delicias locales en un patio de comidas.

Colonia Caroya también es otra opción. La fiesta ocurrirá los fines de semana del 6 al 8 y del 13 al 17/2, desde las 21. Si bien en la agenda está previsto un grupo musical en vivo cada noche, habría que guardarse un lugar para la Noche de Mamarracho (el 16/2), cuando los participantes se disfracen con máscaras de trapo y recuerdan, así, al mítico personaje que desde siempre representa los corsos de la ciudad.

Ocurre que, según cuenta la leyenda caroyense, los antiguos jornaleros solían ir a celebrar el carnaval directamente desde su lugar de trabajo, con la vestimenta sucia, a veces rota… y se colocaban -dicen- una máscara de trapo para ocultar sus rostros transpirados.

Otra propuesta en Caroya será un homenaje a las tradiciones norteñas: el Carnaval Jujeño (7/2), que contará con la presentación de Capi Nieva. Otro homenaje ocurrirá el 14 de ese mes, cuando los varones luzcan su vestimenta típica con sombrero de ala ancha, camisa holgada y faja, y las mujeres salgan a la calle con el estilo de las cholitas norteñas.

¿Más opciones en el resto de la provincia? Destinos como Villa Dolores, Unquillo, Santa Rosa de Calamuchita, Miramar y Mina Clavero tendrán también su fiesta.

 

PROVINCIA DE BUENOS AIRES

Los sábados de enero y febrero, la ciudad de 25 de Mayo estará cien por ciento dedicada al Carnaval. Hay que remarcar que esta urbe es todo un símbolo regional del festejo. De hecho, el encuentro se lleva a cabo en el primer corsódromo que se montó en la provincia de Buenos Aires, situado en las puertas de la propia 25 de Mayo.

Y todo ya está definido: habrá cuatro comparsas, dos batucadas, increíbles carrozas alegóricas y ¡seiscientos artistas en escena! Si hay alguna muy buena razón que le impida ir, no falte, entonces, el 7/3, cuando se despliegue la Fiesta Provincial del Carnaval (entrada, 50 pesos; www.vm.mun.gba.gov.ar).

«Corsolandia» es otro clásico bonaerense que se hace en Las Flores. Como todos los años (esta será la 45° edición) el carnaval será plenamente infantil. Las fechas para tomar nota son el 7 y 8, y el 14 y 15/2, de 20 a 22, cuando salgan a la calle las coloridas carrozas, los trajes, los desfiles de chicos, el ansiado momento de los premios (se eligen un rey y una reina del Carnaval) y la quema del «Rey Momito» (lasflores.tur.ar).

Lincoln es otro epicentro de la provincia de Buenos Aires en materia carnavalesca. La propuesta, titulada «Carnaval Artesanal» (31/1 y, en febrero, el 1, 7 y 8 y del 14 al 17), tendrá comparsas, batucadas, «autos locos», shows, la elección de la reina, los clásicos «cabezudos» y escuelas de samba.

Entre los artistas en vivo están previstos Luciano Pereyra (31/1), Axel (7/2), Carlos Baute (14/2), David Bisbal (15/2) y, para el último día del Carnaval, Piñón Fijo.

Otro destino con buen Carnaval es Mar del Plata, que arranca la fiesta el 31/1 y la continúa todo febrero: habrá 30 corsos y comparsas barriales. Valdría la pena estar allí, en especial, el 16/2, cuando se despliegue el Gran Corso Central (turismomardelplata.gov.ar).

Además está la agenda de Azul, un precioso Carnaval básicamente para chicos, con talleres infantiles centrados en la temática y la convencional agenda de desfiles, del 14 al 17/2. En vivo, tocará el reconocido músico Alejandro Oliva, creador del grupo La Bomba de Tiempo.

Tandil tampoco se queda afuera, con sus festejos murgueros del 14 al 17/2 (a las 21) y la infaltable quema del Rey Momo, a las 20, el día de cierre (turismo.tandil.gov.ar).

Otra ciudad que se suma (entre las muchas de la provincia) es Maipú, que del 11 al 16/2, llevará adelante la Fiesta Nacional Carnaval de la Amistad (www.maipu.gba.gob.ar), un encuentro que realiza desde los años 90, con actividades culturales, deportivas y sociales, la presentación de comparsas, desfiles de carrozas y fogones.

 

JUJUY

La otra gran forma de celebrar el Carnaval está en el Noroeste, donde los aromas de la chicha y la albahaca copan el aire de la Puna y los valles. Aquí el Carnaval se desentierra y se entierra, y salen a la luz los atuendos de colores, los bailes callejeros e instrumentos típicos, como cajas, quenas, charangos, sikus y anatas.

No hay feriado nacional que imponga presencia: en sitios como Maimará, Tumbaya, Tilcara y Humahuaca la fiesta arranca antes, con el Jueves de Compadres (5/2), momento en que los hombres (sin presencia femenina) se reúnen a celebrar en casas de familias que funcionan como sedes carnavalescas. Una semana más tarde, el Jueves de Comadres las tiene a ellas, las mujeres, de protagonistas, entre copas y bailes hasta el amanecer.

Toda la previa es genial, con esa dedicación especial en materia culinaria. Se hacen comidas típicas: picante de pollo y de lengua, asado de cordero y cabrito, empanadas, tamales y humitas y las típicas confituras norteñas.

Para agendar: del 14 al 17/2 será el Carnaval Grande, y el mismo día 17, el Martes de Chaya.

Si busca algo distinto, la yunga jujeña (en particular la localidad de Calilegua) es buena opción. Ahí se realiza el arete guazú, Carnaval guaraní que coincide con la maduración del abatí (maíz), materia base para la elaboración de la sagrada chicha o kanwi. El festejo es increíble: la gente representa, con caretas, a los espíritus del bien.

 

SALTA

Como epicentro norteño, Salta se llena de brillo para recibir la mayor fiesta de febrero, también con el tradicional desentierro y entierro del Diablo de Carnaval.

Pero una semana antes, en los Valles Calchaquíes, arrancará el popular «Topamiento de comadres y compadres», donde sobresalen los copleros con sus cajas. Luego, en el Domingo de Tentación finalizarán los festejos con la ceremonia del entierro del Pujllay: el diablo se cubre con hojas de coca, alcohol y cigarrillos. Y ahí quedará todo el año, hasta febrero de 2016.

En varios destinos del Valle de Lerma -como Salta capital, Cerrillos y Rosario de Lerma-, los fines de semana de lo que queda de enero y en febrero habrá desfiles de murgas y caretones, siempre con ese toque particular de la influencia aborigen local.

Hay que guardarse un lugar en la agenda para pasar un rato en alguna de las «carpas tradicionales»: hay encuentros de bandoneones, se bailan zamba y chacarera, y espontáneamente surgen rondas de copleros. También, juegos de destrezas criollas (pechadas y cinchadas de caballos), en medio de juegos con agua, pintura y harina.

El color ancestral aumenta a medida que uno se acerca a la parte norte de la provincia, a la yunga salteña, donde se hace la celebración del arete o florecimiento del maíz, vinculado a la veneración de la Pachamama.

Es una oportunidad para presenciar de cerca la tradicional danza pim-pim, cuando hombres y mujeres arman grandes ruedas. En el medio encierran a los músicos.

También se desplegarán buenas fiestas de Carnaval en Tartagal y Orán, con desfiles de disfraces y comparsas y el clásico pim-pim, de viernes a domingo desde el 23/1 hasta el 15/2, además de los feriados del 16 y el 17/2.

 

LA RIOJA

El pasado originario diaguita brota de la tierra riojana para celebrar la Chaya, ritual vinculado con la recolección de frutos y el agradecimiento a la Madre Tierra, la Pachamama.

Como se la cuenta, la leyenda es hermosa: unos dicen que la Chaya se enamoró de un joven colono; otros aseguran que su corazón era devoto de Pujllay, semidiós o especie de diablo, ese que se desentierra y entierra en la fiesta norteña. Y para algunos la Chaya sólo es una fiesta de tres días en la capital provincial, momento de brindar por la amistad y la alegría de vivir.

Lo que no cambia son los símbolos: vino, harina y albahaca se sienten en el aire. El momento para disfrutar de las coplas y vidalas que predominan en el Carnaval riojano será del 13 al 17/2 (en La Rioja capital) y, como siempre, además de los topamientos por los barrios, habrá artistas de primera talla: entre otros, Jorge Rojas, Abel Pintos, Horacio Banegas, Los Nocheros, Soledad, Dúo Coplanacu, Chaqueño Palavecino, Los Manseros Santiagueños y Bruno Arias.

 

CHACO

Esta provincia, a veces erróneamente dejada de lado por el turismo que por default se inclina a los destinos clásicos, tiene uno de los mejores y más genuinos despliegues carnavalescos del país: es una opción ideal para quienes quieran vivenciar un carnaval alternativo. La fiesta tendrá fuerza en los corsódromos de las localidades de General San Martín, Villa Angela y Las Palmas. Precisamente es General San Martín la que es considerada «capital provincial del Carnaval», donde brillarán las comparsas Yasí, Porá y Sapucay los días 30 y 31/1. En febrero, el 6, 7, 13 y 14.

Los chicos tendrán su momento para lucirse, cuando desfilen las agrupaciones Yasiporacito y Sapukín, junto a la comparsa Mombay, formada por chicos con capacidades diferentes.

El fanatismo que despierta el Carnaval ha hecho que se dé un premio a la «mejor hinchada».

Las carrozas alegóricas y los trajes son el plato fuerte del espectáculo de Villa Angela (los «Supercarnavales»; del 31/1 al 15/2). Como en las otras localidades, el papel de las comparsas infantiles es dominante. En Las Palmas se llevan a cabo los «Carnavales de la dulzura» (16 y 17/2). Las comparsas de chicos y grandes mostrarán sus destrezas en el corsódromo de la avenida San Martín.

Otra buena opción es formar parte de la fiesta de murgas de Puerto Tirol, donde la fiesta del Rey Momo congrega las miradas.

 

MENDOZA

Con más de mil artistas en escena, aún no se ha definido dónde se concentrará el Carnaval mendocino, ya que, como aclararon en el organismo oficial de Turismo, Mendoza busca «un modo federal de organizar los festejos populares». Esto significa, evitar que se concentren en la capital provincial. En breve se difundirán los detalles.

Lo que sí se sabe es que arranca el 17/2 y a las 17. En ese momento mostrarán su esplendor las murgas mendocinas, incursionando en el estilo uruguayo, los bailes andinos y la samba brasileña.

 

NEUQUEN

Uno no va a la Patagonia oeste con la expectativa de encontrar un gran despliegue carnavalesco (sus íconos nacionales, se sabe, son muchos otros). Sin embargo, San Martín de los Andes, en Neuquén, sorprende con sus propuestas, en especial desde que se instauraron los feriados nacionales abocados a esta fiesta: todo comenzará el lunes 16/2 a las 18, lógicamente en la avenida principal de la ciudad, la San Martín, y esquina Curruhuinca.

De allí hasta la calle Rivadavia se hará un desfile alusivo con murgas locales e invitadas de la región, cuerda de tambores y carrozas de distintas juntas vecinales. Tras el desfile, habrá un baile popular callejero, con bandas en vivo y un entretenido concurso de disfraces (sanmartindelosandes.gov.ar).

 

CIUDAD DE BUENOS AIRES

Todos los años se interrumpe el tránsito en distintas calles porteñas para dar paso a las murgas de la ciudad de Buenos Aires, que desde la más espontánea vecindad ensayan todo el año para representar, en febrero, su barrio. Lo hacen a través de estandartes, colores propios y un fuerte sentimiento de cofradía.

 

La porteña no es una celebración menor: el año pasado se contabilizó la participación de un millón de vecinos. Los chicos participan felices con los concursos de disfraces y las tradicionales guerras de espuma.

Desde el Gobierno de la Ciudad informaron que en la edición del Carnaval 2015 habrá espectáculos de tango, folclore, cumbia y salsa. Además, sorteos con premios que otorgan distintas asociaciones civiles.

Este año se sumarán como sedes varios clubes y plazas. Las fechas para agendar son todos los fines de semana de febrero: los sábados del mes, desde las 19 hasta las 2 de la mañana, y los domingos, desde las 19 hasta la medianoche.

¿Y a dónde conviene ir? Además de la novedad de que este año vuelve -en avenida Pérez Galdos entre Necochea y Pedro de Mendoza- el corso del barrio de La Boca (un clásico que había estado ausente durante varias temporadas), lo ideal es diseñar un circuito urbano para cotejar, en las distintas fechas, las diferencias entre los corsos de los distintos barrios.

 

De todos modos, no viene mal hacer un recorte variado de los sitios donde la fiesta carnavalera se pone más intensa. Algunos de los lugares más emblemáticos son Boedo (entre las avenidas Independencia y San Juan), el barrio de Villa Urquiza (en avenida Triunvirato, entre Monroe y Olázabal) y Mataderos, donde además de los tradicionales desfiles habrá una proyección alusiva en pantalla gigante.

Fuente: Clarin

Publicado en: Espectáculos   Etiquetas: , ,