Néstor Zapata rinde homenaje al radioteatro con «Bienvenido León de Francia»

Quien aguarda al jueves para el estreno porteño "con la expectativa de un estreno oficial que nos de pie para poder iniciar un largo recorrido".



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Quien aguarda al jueves para el estreno porteño «con la expectativa de un estreno oficial que nos de pie para poder iniciar un largo recorrido».




«Como la provincia nos va a ceder una unidad móvil que le pasó Nación, vamos a llevar ‘Bienvenido León de Francia’ por el sur de Santa Fe, el norte de Buenos Aires, el oeste de Entre Ríos y el este de Córdoba, lo que nosotros llamamos la Pampa Gringa», adelantó Zapata en charla telefónica con Télam.

En el mismo sentido y con idéntico entusiasmo, el teatrista, de 73 años, sostuvo que «a la película queremos hacerla circular porque descubrimos que nos interpela desde varios lugares».

«De hecho -añadió- acá en Rosario está siendo un suceso con cuatro funciones diarias y la síntesis que la gente comenta cuando termina de verla, es que hicimos una película querible, como un paseo sensible».

El artista fundamentó que «esta es una historia que se produjo en nuestros pagos y que en 1978 escribí para teatro con María de los Ángeles ‘Chiqui’ González (quien actualmente se desempeña como ministra de Innovación y Cultura de Santa Fe)».

«Pero con el paso de los años -reveló- se me ocurrió llevar esta idea al cine con la intención de homenajear a quienes hacían el radioteatro en nuestro país y que es un fenómeno incomparable».

Con una pasión intacta, este docente y director teatral que puso más de 60 obras en unos 15 países, abundó que «el radioteatro era una disciplina que duraba todo el año y constituía una fuente de trabajo increíble para hombres y mujeres que han sido olvidados en el tiempo».

Sin embargo, a esa historia originalmente plasmada sobre tablas, Zapata decidió adosarle contexto histórico y social para concretar su demorada experiencia como realizador cinematográfico de ficción.

«Decidimos darle un marco histórico entre el 16 de junio de 1955, el día que la Marina bombardea la Plaza de Mayo, hasta el golpe de Estado contra el gobierno de Juan Domingo Perón, el alzamiento de Valle y los fusilamientos de José León Suárez, para enmarcar la vida de los personajes», explicó sobre la que definió como «mi obra póstuma aunque sea mi primera película».

Y, más allá de las conocidas consecuencias políticas que generó aquella dictadura, el creador apuntó que «esa bisagra marcó el inicio de la muerte del radioteatro».

«En 1956 fueron intervenidas las radios, comenzó la censura a los libretos y las compañías consideradas adictas al régimen por el simple hecho de hacer algo tan popular, fueron desactivadas», enumeró.

«Bienvenido León de Francia» es asumida por el elenco local integrado por Raúl Calandra, Sara Lindberg, Naun Krass, Matías Martínez, Griselda De Lorenzi, Maru De Rosa y Matías Tamburri, a quienes se agregan dos ilustres rosarinos de proyección nacional como Luis Machín y Darío Grandinetti.

Con música original de Jorge Cánepa, el filme suma dos canciones en las voces de los reconocidos Litto Nebbia y Rubén Goldín, otros dos rosarinos que trascendieron largamente las fronteras de la ciudad.

La película suma como elementos tan pintorescos como emblemáticos la utilización de la locomotora a vapor «La Emperatriz» (construida en 1914 y que en 1926 batió el récord sudamericano de velocidad para trenes, llegando a 140 kilómetros por hora) y de un micro de 11 asientos marca Chevrolet, modelo 1947, que debió ser reconstruido para el rodaje.

Zapata resumió que de la mano de todos esos afluentes, «se dio una experiencia buena, muy jugosa, que me tiene muy feliz. Por primera vez tengo la sensación de que algo va a andar bien y eso que soy muy autocrítico con lo que hago y llegué a bajar obras el día del estreno y volví a hacerlas para subirlas un año después».

A la espera de todo el recorrido audiovisual y geográfico de su primer filme, contó que «como el año que viene se cumplen 50 años del espacio Arteón -que fundó- vamos a reponer ‘Malvinas, un canto a la esperanza’, que hicimos con Nebbia en 1994».

«Pero además -concluyó- también haremos un documental sobre el lugar que forma parte de la identidad de Rosario, se va a llamar ‘Días de miel y fuego’ porque la sala la quemaron en 1972».

Fuente: Telam