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el titular del BCRA viaja a Beijing para estar en las reuniones que encabezará el secretario de Finanzas, Pablo López, para obras.

El presidente del Banco Central, Juan Carlos Fábrega, viajó a Beijing luego de haber mantenido una reunión con su par chino para sellar la asistencia que recibirá el banco vía el swap de monedas. La novedad en esta oportunidad es que, por pedido oficial, la autoridad monetaria partió de Suiza (donde se realizó la cumbre de banqueros centrales del BIS) a Beijing para acompañar la comitiva del Ministerio de Economía encabezada por el secretario de Finanzas, Pablo López.

Según supo este medio, el titular del Central no tendrá una nueva tanda de reuniones con funcionarios del BC de China, sino que estará trabajando con el equipo de Economía para cerrar los créditos para financiar obra pública en Santa Cruz y del ferrocarril Belgrano Cargas.

La incursión de Fábrega en terreno ajeno es, según la lectura política, un guiño del Gobierno a su desempeño para conseguir divisas en un contexto de escasez. Fábrega logró cerrar el swap con China que permitirá que, tal como pregona, las reservas terminen este año en niveles similares a los actuales. El dato no es menor porque actualmente la liquidación de dólares viene en baja, y por ende la oferta de divisas que puede comprar el Central para sus reservas es menor.

Fábrega se anotó unos cuantos puntos con esta negociación de divisas con China, según la visión del Gobierno. También, se sabe, el titular del Central goza de la confianza de la presidenta Cristina Kirchner, quien suele llamarlo directamente cuando hay ruidos en la plaza cambiaria. Se conocen hace años y la relación, cuentan, es muy directa. Los interlocutores del banquero son la presidenta y Carlos Zannini, el secretario de Legal y Técnica.

AHORA QUEDA EL FINANCIAMIENTO CHINO, COMO OTRORA FUE EL DE VENEZUELA

Economía afina las cuestiones operativas para el plan de obras

La comitiva de Economía que está yendo a China estará enfocada, también según fuentes oficiales, en «cuestiones operativas» como informes de condiciones de obra, tiempos de las obras, etc. de los créditos firmados por el presidente de China en su viaje a la Argentina en julio.

Sea como fuese, la realidad es que la movida de Fábrega mostrándose con el banquero central chino para activar el swap y ahora este viaje del equipo económico también para activar el financiamiento para obras, tiene una sola lectura. Que la búsqueda de fondos es una prioridad del Gobierno.

El default de la deuda aleja cualquier intento por colocar bonos en el mercado, por ende esa ventanilla está cerrada. Ahora queda el financiamiento chino, como otrora fue el de la Venezuela de Hugo Chávez (comprando bonos y otras yerbas) para cerrar el bache financiero del año. El plan es que tanto el dinero por el swap como por las obras empiece a llegar antes de diciembre para terminar el 2014 con más oxígeno en lo cambiario.

Fuente: Infobae.com