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Escocia presentó un equipo que es el que menos caps (partidos internacionales) acumula, detrás de la selección de Namibia, mientras que los Estados Unidos soñaban con dar el batacazo en el estadio de Leeds, después del traspié en el primer partido ante Samoa.

El conjunto escocés se recuperó tras irse en desventaja al entretiempo (perdía 13-6) y mostró autoridad en la segunda etapa. Al final, festejó con los tries de Visser, Maitland, Nel, Weir y Scott, más las conversiones de Russell, Laidlaw y los penales de Russell y Hoog. Los Estados Unidos, en tanto, sólo pudieron inquietar con el try de Lamositele, que los acomodó para una victoria parcial que luego se diluyó con el peso de las acciones.

De esta forma, Escocia mantiene el liderazgo en el Grupo B, ya que es el único conjunto que ganó los dos partidos, con 10 puntos.

Irlanda, victoria y record. Irlanda cumplió con su condición de absoluto favorito y arrolló a Rumanía en Wembley (44-10), donde se volvió a romper el récord histórico de asistencia a un partido de la Copa del Mundo de rugby, con 89.267 espectadores.