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Pezzella celebra haber salido del banco para ser parte del equipo sensación de Gallardo. El defensor dice que no se siente suplente

-¿Cuántas entrevistas diste el día después del Pezzellazo?

-Uy, un montón: ya perdí la cuenta. Encima, a mí no me gusta demasiado hablar, pero River es un club que también te exige esto por lo grande que es. Eso sí: en un rato apago el teléfono así puedo descansar, ja. A falta de Teo, el que se besó el escudo en Mendoza fue Germán Pezzella. El gol por Copa Sudamericana sirvió para que River prolongara su buena racha y también para mantener la tónica de sus conquistas: su primer gritó valió un empate agónico ante Colón, el siguiente para ganarle la Superfinal a San Lorenzo y el más reciente para vencer sobre la hora a Godoy Cruz. “Siento una gran alegría por haber convertido en la última jugada y que ese gol sirva para afrontar con más tranquilidad la revancha en el Monumental”, le cuenta a Olé el defensor que mejor le cuida el puesto a Maidana.

-¿Cómo es estar atrás de un referente que hace rato viene en un alto nivel?

-Y, es complicado… Hay que entrenarse al máximo, esforzarse muchísimo, y aprovechar cada chance para meterle pequeñas dudas al técnico.

-¿Qué es lo que más cuesta cuando sos suplente?

-La verdad, yo no me considero suplente. Aunque a veces es complicado no jugar seguido porque te agarra ansiedad: te entrenás, te entrenás, y llega el fin de semana y no te toca. Entonces, hay que calmarse y pensar que ya vendrá la oportunidad.

-¿En algún momento de ansiedad llegaste a pensar en irte de River?

-Se te cruza por la cabeza ir a buscar más continuidad a otro lugar, pero al mismo tiempo te dan ganas de quedarte en este club… Yo me la jugué por ese sentimiento, y ya dejé de lado esa idea de irme.

-Gallardo dijo que todos tienen que mentalizarse para esperar la chance: ¿lo sienten así?

-Tal cual. Estamos afrontando tres torneos en el mismo semestre y éste no es un plantel muy largo que digamos. Por eso tenemos que estar todos bien predispuestos para cuando llegue el momento.

-¿Cómo es el Muñeco como entrenador?

-Desde que llegó hizo hincapié en el estilo de juego, y se lo ve convencido de cómo quiere jugar, está atentos a todos los detalles y se fija en lo que hay que corregir para que la idea cada día salga mejor.

-¿Y qué imagen te quedó de Ramón Díaz?

-La mejor. Todo el tiempo hubo un grupo homogéneo, nos llevábamos muy bien y disfrutábamos del día a día. Tanto los jugadores como el cuerpo técnico teníamos una relación muy amena que hizo todo más llevadero. Por suerte, conseguimos el objetivo.

-¿Ese título les da tranquilidad para desarrollar el método Gallardo?

-No sé si tranquilidad. Creo que lo que hizo fue descomprimir un poco la situación porque River necesitaba ganar algo. Ahora se redobló la apuesta y además del torneo, tenemos la Sudamericana y la Copa Argentina. Lo que pasó ya está y no podemos quedarnos con eso: este club te exige siempre más.

-¿Disfrutás de ver jugar a este River?

-La verdad que sí: se disfruta mucho y estando adentro, el doble. Hay una idea clara, este equipo propone la búsqueda permanente del arco rival, siempre intenta manejar la pelota y hacerse cargo del partido. Es una propuesta arriesgada porque tenemos que estar atentos a cualquier contra del rival, pero es un estilo al cual nos adaptamos rápido y vamos mejorando.

-¿Cómo manejan los defensores esta idea tan ofensiva?

-Este tipo de juego requiere una presión alta, una máxima atención, hay que estar preparados y atentos para no dejar espacios y quedar cerca de nuestros compañeros.

-¿Te sentiste cómodo contra Godoy Cruz?

-En general redondeamos un buen partido, y creo que en lo personal también. En el primer tiempo nos complicaron, pero tomamos los recaudos necesarios y en el segundo levantamos y logramos un triunfo importante.

-¿Sentís que vas recuperando tu nivel?

-Sí, de a poco voy retomando la confianza, aunque acá, como en todos lados, necesitás continuidad para demostrar lo que sos capaz.

-Se viene Tigre y por fin una semana larga después de la seguidilla: ¿cómo llegan?

-Bien, nos vamos recuperando como se puede. Tigre es un rival importante, pero jugamos en nuestra casa y queremos seguir ganando y con este juego que la gente disfruta. Después, ya vendrá una semana larga y ahí se podrá trabajar con un poco más de tranquilidad.

Fuente: ole.com.ar