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Facundo Campazzo no se arrepiente de elegir al Real Madrid pese a tener pocos minutos. El cordobés tocó varios temas en una larga charla. 

Tranquilidad y paciencia. Dos palabras que dicen mucho y que se convirtieron en parte fundamental del diccionario de Facundo Campazzo en España. El cordobés se fue de Argentina siendo multicampeón con Peñarol y convertido en el mejor de todos a nivel nacional y llegó al Real Madrid para ser uno más. Al menos por ahora. ¿Desesperación? ¿Ansiedad? Para nada. El combo de Facu, pese a sus 23 años, también incluye madurez. Sabe que ser el tercer base del mejor equipo del mundo a nivel FIBA es un privilegio que debe aprovechar. Por eso se arma de tranquilidad y paciencia en esta primera experiencia fuera del país para encarar el cambio de rol y seguir creciendo. Sereno y reflexivo, pero sin perder la chispa que lo caracteriza, Facu atiende el teléfono y se prende a una larga charla con Olé.

-Primeros meses fuera del país, casado, en una ciudad y equipo top. ¿Cómo asumiste todo en estos primeros meses?

-Son muchos cambios importantes en poco tiempo, en mi vida privada y a nivel deportivo. Me encontré con un Madrid que es uno de los mejores clubes del mundo. Desde el principio traté de abrir los ojos y aprender de lo que tenía alrededor. De a poco me estoy acostumbrando.

-Estabas acostumbrado a jugar mucho, a tener responsabilidades y ser importante en un equipo, pero ahora estás en un rol diferente. Si bien sabías qué iba a ser así, ¿cómo lo llevás?

-Como dijiste, sabía que durante toda la primera temporada iba a ser así. Cuesta acostumbrarse, no te lo voy a negar, pero hay que adaptarse para el bien del equipo y para tratar de cumplir los objetivos al final de año. Así que tengo la cabeza metida en esta adaptación, en ganarme la confianza del entrenador (NdeR: Pablo Laso). No es fácil, pero nosotros estamos acá para hacer cosas difíciles y tenemos objetivos muy grandes. Tengo que tener tranquila la cabeza y ser paciente.

-Parece una situación a la que estás acostumbrado, eso de superar escalones difíciles en tu carrera…

-Sí, y es un objetivo. Es un año muy largo en el cual voy a tener muchas oportunidades y tengo que saber aprovecharlas. Estoy mentalizado en mi rol en el equipo y quiero hacerlo a la perfección. Me voy a equivocar miles de veces, lo importante es saber corregir.

-¿Cuál es puntualmente tu rol y qué es lo más difícil de entrar poco tiempo y tener que rendir?

-Cada vez que me toca entrar tengo que tratar de defender duro, de presionar al base rival y que juegue incómodo. En ataque, tratar de dirigir al equipo, sin perder la identidad de juego que me trajo acá, pero tratando de tener también un orden y que el equipo no baje de nivel. Pero más que nada es la defensa, presionando toda la cancha. La ACB y Euroliga son torneos de mucha competitividad y eso me cuesta todavía un montón. Pero es una cuestión de adaptación.

-¿Qué más me podés decir de la ACB y Euroliga? ¿Las imaginabas así?

-La ACB es muy competitiva, hay varios que pueden pelear tranquilamente. La calidad de extranjeros y de españoles es muy buena y completa. Es todo muy táctico, mucho más físico y con más talla. Es un lindo desafío para afrontar y quiero seguir estando acá. La Euroliga es más competitiva aún. Son partidos duros, físicos, con localías muy fuertes. Si me toca jugar trato de aprovechar todo, es la mejor competencia después de la NBA.

-Siempre miraron de reojo tu talla. ¿Cómo te sentís en esta situación?

-Nada es fácil y menos a este nivel. Pero siento que puedo dar más todavía. Sé que me va a costar pero tengo que trabajar duro. Son como partidos de un Mundial, que no te permite estar físicamente mal.

-Me imagino que Nocioni es clave en todo este proceso de adaptación…

-Chapu me está ayudando un montón, adentro y afuera de la cancha, para lograr esa paciencia y tranquilidad que tengo que tener. Creo que eso me está facilitando más las cosas. Todos lo conocemos… Los de esa Generación (Dorada) te enseñan en todos lados. Me está ayudando muchísimo, como mis compañeros y cuerpo técnico, mi familia y Claudio (Villanueva), mi representante.

-Tenés al lado a dos grandes bases como Sergio Llull y Chacho Rodríguez. ¿Cómo es el día a día con ellos? ¿Qué les mirás y qué tratás de sacarles?

-Son tremendos jugadores. Los había enfrentado con la Selección en amistosos, pero tenerlos toda la temporada es más lindo. Trato de aprender, son dos jugadores de características distintas y dos cracks. Enfrentarlos en entrenamientos y verlos en los partidos me ayuda mucho. Trato de ser una esponja para absorber lo que más pueda. Llull puede jugar tranquilamente en la NBA, Chacho jugó allá y viene de ser el MVP de la Euroliga. Trato de aprender todo.

-Qué es lo que más te sorprende de cada uno?

-De Llull, la capacidad física que tiene. Su salto, penetración, actitud… También le gusta aparecer en los momentos clave, cuando las papas queman. De Chacho, su juego de pick and roll, inteligencia, la manera que tiene de leer el juego. Es muy lindo de ver, muchos se paran de sus sillas para aplaudirlo y en el banco nos pasa lo mismo.

-En las redes sociales y en algunos medios españoles hay muchas críticas hacia vos. ¿Las leés?

-Sí, por las redes sociales, pero trato de hacer mi trabajo y mantenerme al margen. Lo tomo con tranquilidad, siempre va a haber críticas buenas y malas, con eso vive el deportista.

-Sabiendo cómo sos y a lo que venías acostumbrado, ¿en algún momento te come la ansiedad por querer saltar a la cancha, llevarte a todos por delante y tener más tiempo para demostrar?

-No, lo tomo con tranquilidad. Trato de hacerle caso al DT, escuchar a mis compañeros y ayudar al equipo desde el lugar que me toque, adentro o afuera. Trato de afrontar el día a día con este pensamiento.

-¿Cuál es tu objetivo para los próximos meses?

-Terminar de la mejor manera a nivel colectivo, consiguiendo todos los torneos que se nos pongan adelante. Personalmente, seguir trabajando duro, mantenerme a este nivel y seguir en este equipo, donde me siento muy cómodo y me tratan muy bien.

-¿En algún momento te arrepentís de haber ido al Real Madrid y estar en esta situación de pocos minutos en lugar de, quizás, buscar otro club sin tanto nombre pero que te diera la chance de tener más protagonismo?

-Nunca. Estoy en el mejor equipo del mundo FIBA, con una organización NBA, y vine acá para quedarme. En ningún momento me arrepiento de la decisión y haré todo para quedarme.

Fuente: Olé