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La actriz protagonista de La Niñera, Fran Drescher, tuvo su auge en los ’90 por la gran repercusión que tuvo la serie y, además, era admiraba por su esbelta figura. Sin embargo, reveló la trágica verdad que vivía detrás de escena.

Durante su éxito en el programa, sufría internamente sin que el público lo supiera. «Vuelvo a mirar algunos episodios y recuerdo lo que estaba pasando detrás de escena, y no era nada lindo», dijo en un evento en Nueva York.

En 1993, cuando empezó la serie, pesaba 64 kilos para su 1,70 de altura y en la quinta temporada llegó a tener un peso de aproximadamente 49 kilos. Tras haber sobrevivido a un cáncer de útero, Drescher ahora está en un peso saludable y enfocada en «honrar» su cuerpo.

Durante la charla aseguró que no extraña para nada su anterior físico y que se quedó con algunas piezas del vestuario de su personaje, pero que la mayoría ya no le entran: «Estoy bien con eso. No podría ser tan flaca y verme bien ahora».

En 2014, reveló que 10 años antes de que le diera vida a Fran Fine sufrió una situación traumático: fue violada y amenazada con un arma de fuego. En este sentido, contó ahora que tuvo que lidiar con su pasado cuando se volvió famosa.

El hecho ocurrió en Los Ángeles, cuando entraron a robarle a su departamento. Por años intentó tapar el asunto, pero se dio cuenta de que no contarlo le ocasionaba mayor dolor. En 1988 comenzó a escribir guiones, hasta que dio en el clavo con La Ñiñera y la produjeron.

«¡Gracias a Dios que estaba haciendo terapia! Honestamente amaba ir al trabajo y ser Fran Fine, porque ella era totalmente divertida y liviana, y mi vida era una especie de desastre. Creo que por esto estaba tan delgada»,  dijo.

Fuente: Clarín