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En medio del conflicto entre el Gobierno y la ciudad de Buenos Aires por el transporte, este jueves será el primer día en el que ambas administraciones se sienten a discutir. La decisión de la Nación de trasladar la competencia sobre 32 líneas de colectivos al gobierno porteño despierta controversias. En la práctica, representa una quita de 13.000 millones de pesos y abre incertidumbre sobre el costo del boleto.
El ministro de Transporte de la Nación, Alexis Guerrera, encargado de ejecutar el movimiento, recibirá a los dos enviados de Horacio Rodríguez Larreta, el ministro de Gobierno porteño, Jorge Macri y el jefe de Gabinete de la Ciudad, Felipe Miguel, para comenzar a abordar la situación, que hasta ahora se ventiló en los medios.
Esa reunión se complementará con otra. Desde las 15, el secretario de Transporte nacional, Diego Giuliano se sentará junto con la secretaria porteña del área, Manuela López Menéndez y el ministro de la Provincia, Jorge D’Onofrio.
Más allá del cortocircuito, se anticipa una discusión prolongada. En el Ministerio de Transporte reconocieron a LA NACION que se trata de un primer acercamiento y que el diálogo “va a ser larguísimo”. Por esa razón, las fuentes consultadas anticiparon que se acordará “una serie de reuniones para el futuro”. Y remarcaron que no esperan definiciones para este jueves.
La postura de la gestión de Alberto Fernández es que el gobierno porteño debe hacerse cargo de las líneas que circulan dentro de su territorio. El traspaso de esa responsabilidad supone que la ciudad no contará con los subsidios que actualmente la Nación pone para cubrir parte de los boletos. En 2021 la Casa Rosada pagó por las 32 líneas que recorren la ciudad 13.850 millones de pesos por compensaciones tarifarias por oferta y demanda y 820 millones adicionales por gasoil a precio diferencial.
El kirchnerismo pone de manifiesto lo que representa ese subsidio para la CABA frente a lo desembolsó para el resto del país. Para todo el Interior, en tanto, se destinaron 28.000 millones de pesos el año pasado. Fue a través del Fondo Compensador instaurado durante el gobierno de Mauricio Macri para reemplazar a los subsidios y otros 2000 millones de pesos por tarifa social. Es el Estado nacional el que paga la tarifa social de las localidades adheridas al sistema de la tarjeta Sube.
“Abrimos el diálogo para devolverle a la Ciudad de Buenos Aires aquello que las provincias tienen y controlan por sí mismas: las líneas de colectivo que circulan en su territorio. Queremos establecer un sistema razonable, que sane la brecha actual”, argumentó el secretario de Transporte, Diego Giuliano.
El traspaso podría impactar en el valor del boleto mínimo, que actualmente se ubica en 18 pesos, mientras que en el interior del país llega a 45. El ministro de Gobierno porteño, Jorge Macri, admitió que “podría más que duplicarse el costo del boleto de colectivo por decisión del gobierno nacional”
Con el debate candente, la Ciudad recalcó que aporta el 50% de los subsidios a los colectivos. Ratificó que sostendrá ese compromiso económico pero subrayó que, sin la asistencia nacional, el boleto se encarecerá. Jorge Macri estimó inicialmente que la tarifa mínima podría costar entre 40 y 45 pesos.
Este miércoles, en la previa de la reunión con la Nación, Jorge Macri, amplió su posicionamiento en una entrevista con LN+. “La tarifa de colectivos la define el Gobierno. Nosotros tenemos ninguna potestad de hacerlo”, afirmó.
“Si el Gobierno quiere traspasarnos el transporte, y si nosotros quisiéramos aceptarlo, discutiremos cómo salimos del lío que armaron ellos. No lo inventamos nosotros. Ni la inflación, desde que gobiernan, ni haber clavado la tarifa en 18″, planteó el funcionario porteño.
Por su parte, el jefe de Gobierno planteó la semana pasada que se trata de un nuevo ataque a la “autonomía porteña”. Sin embargo, como publicó LA NACION, no está previsto que vuelva a confrontar con el Gobierno por los subsidios. Prefiere mantenerse sumergido, en su papel de gestor, lejos de las disputas políticas. La postura se relaciona, además, con la discusión de liderazgos dentro del espacio opositor en la que Larreta evita correrse hacia los extremos.
En medio del debate, el Gobierno lanzó el Fondo Compensador 2022 que implica una suba del 40% de los subsidios para el interior del país, una medida que deja a un lado a la ciudad. La decisión solo alcanza al primer trimestre y representa 9600 millones de pesos. Se trata de un reparto de 3200 millones por mes hasta marzo. En la Nación, hablaron de un monto total anual de 46.000 millones de pesos.
La discusión se complejiza con la provincia de Buenos Aires. Mientras el Gobierno toma una decisión determinante frente al territorio gobernado por PRO, adopta otra postura respecto de la jurisdicción que está en control del kirchnerista Axel Kicillof.
Si bien la Casa Rosada trazó una estrategia para aislar a Horacio Rodríguez Larreta junto a otros gobernadores que cuestionaron el tamaño de los subsidios en la ciudad, otros comenzaron a tomar distancia de ese punto y pidieron subir a la discusión a la provincia de Buenos Aires.
Una reciente declaración del gobernador cordobés Juan Schiaretti llevó agua para las oficinas porteñas. “No es solución que le quiten los subsidios a una jurisdicción, como es CABA” expresó. El mandatario reclama una discusión global en el Congreso. “Nosotros queremos una ley racional, equitativa y federal. Eso es cuidar la patria de los argentinos, considerándolos a todos por igual”.
El gobernador de Jujuy y presidente de la UCR, Gerardo Morales, llegó a hacer un guiño inicial al proyecto de la Nación. “¿Cuánto pagan ustedes el boleto? 18 pesos. Y los ‘changuitos’ en Jujuy lo pagan 50. Eso tampoco es justo”, señaló Morales en un retiro de Juntos por el Cambio la semana pasada.
Más tarde, Morales revisó su planteo. Si bien dijo que el distrito porteño “no produce nada y ahí está toda la plata” -una declaración que cayó mal en las oficinas sobre la calle Uspallata-, amplió su posicionamiento. “Sería injusto que el gobierno nacional solo le quite subsidios a la Ciudad”, indicó Morales a través de sus redes. El correntino Valdés también se expresó en la misma línea.
Desde la Provincia se atajan frente al debate y manifiestan que pagan el 91% que del total. No obstante, el argumento opositor es que La Plata recupera esa diferencia a través de los aportes del Tesoro que realiza el Estado nacional.
En la jurisdicción de Axel Kicillof hacen otro análisis respecto de los subsidios. “Si los dividimos por la cantidad de habitantes me da 112 pesos por cabeza, si lo dividimos por la cantidad de habitantes del conurbano me da 41. Ahí está la asimetría y además, el tercer cordón termina subsidiando a la Capital Federal”, dijo a C5N el ministro de Transporte bonaerense, Jorge D’Onofrio.
La provincia de Buenos Aires se sumó a Catamarca este miércoles y adhirió al Fondo Compensador 2022, medida que acentúa las diferencias entre el territorio porteño y el resto de las jurisdicciones.
Fuente: La Nación
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