En medio del cada vez más tenso conflicto en el Hospital Garrahan por el reclamo salarial de los médicos residentes, el Gobierno nacional aseguró que «los recursos están» para llegar a un acuerdo y la «voluntad» política también, pero le hizo un pedido a los profesionales para avanzar en la negociación.
«¿Por qué no le pagan más?», le preguntaron con énfasis a la viceministra de Salud, Cecilia Loccisano. Fue durante una entrevista con radio Mitre, después de señalar que una médica residente cobraba $ 797.061 y señalar, con el mismo énfasis, que era «muy poco».
«Antes de ayer los residentes presentaron una nota para tener una reunión en el Ministerio, ayer tuvimos dos reuniones. Necesitamos que los residentes se sienten con nosotros a trabajar para cerrar una propuesta. La voluntad está, la vocación está y los recursos están, porque están en el Hospital, lo que están es aplicados de manera incorrecta, ineficiente», dijo la funcionaria de la cartera que conduce Mario Lugones.
ntendemos la urgencia de resolver esto y encontrar una solucion que ponga en valor el trabajo de los residentes y los médicos de planta. Por eso necesitamos que suspendan al menos por 48 horas la medida de fuerza para poder sentarnos a concretar una propuesta».
Pese a la conciliación obligatoria, la tensión y el tono de los reclamos va en aumento. Los profesionales de salud protestan por sus magros sueldos y comparan esos haberes con los que, por ejemplo, cobrarían en un hospital porteño o en el sector privado.
El problema no es nuevo. Los profesionales médicos manifestaron en los últimos meses una creciente preocupación por “la fuga” de especialistas que dejaron el centro de salud en busca de mejores condiciones salariales. Lo mismo sucede con el número decreciente de residentes que eligen ese hospital para hacer su carrera.
“Médicos pobres, país enfermo” y “Médicos luchando, el Estado mirando” fueron algunas de las consignas que los trabajadores eligieron para hacer visible – a través de carteles- el malestar que aqueja tanto a quienes están haciendo la residencia, como a quienes son jefes de los distintos servicios.
Fuente: Clarín