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La fiscal Carla Cerliani pidió cuatro años de prisión efectiva para el árbitro Martín Bustos, en una audiencia en la que presentó la acusación contra el referí, acusado de grooming (acoso por medios tecnológicos a menores de edad) a dos jugadores de las divisiones juveviles de Newell’s.

Bustos, además, es uno de los seis acusados en la causa donde se investiga los abusos contra los futbolistas de las divisiones juveniles de Independiente, pero en ese caso no fue preso porque el 13 de septiembre de 2018, la Sala I de la Cámara de Apelaciones de Lomas de Zamora bajó la calificación del delito para tres de los sospechosos y quedó imputado de corrupción de menores.

Este árbitro fue aprehendido a principios de junio en Rosario, luego de que se presentara por parte de las autoridades de Newell’s una denuncia donde sostenían que Bustos se había contactado con dos jugadores a los que, se sospecha, pretendía abusar.

El árbitro se hizo pasar por un masajista y le ofreció al menor una sesión a cambio de 200 pesos. Hizo lo mismo con otro chico de 15 años, a quien le prometió que lo iba a recuperar de una lesión que había tenido.

Este viernes se cumplen los 90 días de prisión preventiva de Bustos, por lo que la justicia debe definir su situación y la medida cautelar, es decir, si prorroga esa condición hasta el juicio. La fiscal no pidió la prórroga de la detención, pero seguirá preso por la causa de Independiente que por el antecedente de Rosario perdió el beneficio de la excarcelación.

Fuente: La Nación