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Abrió sus puertas en Espacio Fundación Telefónica, con entrada gratuita 

Se trata de una experiencia participativa y lúdica que conecta al espectador otra vez con pasatiempos inolvidables como el Tetris, el Donkey Kong y el Super Mario Bros pero también con algunos de los más nuevos, que cuentan con anteojos 3D, como «Middle-earth: Shadow of Mordor», un videojuego de rol y acción; o un flipper en pantalla plana.

«Play the game», organizada junto al Museo de Informática y con curaduría de Diego Gustavo Macchi, exhibe consolas representativas de la evolución tecnológica desde 1972 hasta la actualidad, que da al visitante la posibilidad de jugar activamente a más de cien videojuegos en sus plataformas originales.

Los juegos, que tendrán reposición quincenal para ampliar la variedad de la propuesta, fueron elegidos por su diseño interactivo y creatividad en la que se destacan su calidad visual y estética: así, los visitantes se encontrarán con Atari 2600, Sega, Nintendo Nes, Super Nintendo, Play Station 2, Xbox, Xbox One, y Playstation 4, entre otras.

La exposición se retrotrae al histórico Pong, el primer juego desarrollado por Atari en 1972, aquella mesa de tenis de pantalla negra y pelotita blanca, al ritmo de sonidos robóticos, cuyos controles eran dos perillas: «no fue el primer videojuego de la historia pero sí el primero verdaderamente masivo y popular», explicó Gustavo Blanco, gerente del espacio Telefónica, quien tuvo a su cargo el montaje.

Incluso algunos de los fondos musicales que acompañan a los jueguitos representan un certero viaje en el tiempo a través de la imaginación, y pueden remontar a más de uno a los veranos en Mar del Plata, entre «fichines» y tardes de lluvia.

«Es una muestra interactiva y participativa, para incluir a la familia, que evidencia la evolución de la tecnología. A través de esta muestra apostamos a la batalla de generaciones», agrega Lorena Andrenacci, analista de comunicación y social media de Fundación Telefónica.

Además de los juegos con los que el visitante puede interactuar, en las salas se exhiben más de 40 consolas, detrás de vitrinas, con una breve historia de su derrotero y cantidad de unidades vendidas.

Por ejemplo, la Atari 2600 -«sinónimo de videojuegos»- fue la consola que revolucionó el mercado a fines de los 70 y permitía a los usuarios disfrutar ilimitadamente de los mismos juegos por los cuales tenía que pagar en los comercios de arcades tipo Sacoa.

Debido a que la empresa no patentó el hardware aparecieron cientos de copias como las Dynacom en Argentina. Aún así, la Atari 2600 llegó a vender 30 millones de unidades en las que podían utilizarse más de 500 juegos con sólo introducir un cartucho del tamaño de un celular.

En 1980, Nintendo Game & Watch lanzó una línea de consolas portátiles de videojuegos con pantalla LCD: pesaban 60 gramos, eran monocromáticos, con dos niveles de dificultad y traían títulos como Popeye, Climber, Punch out o el Donkey Konh 2. Llegó a vender 43 millones de unidades.

El recorrido incluye también la NES (Nintendo Entertainment System), aparecida en 1985, o la Nintendo Game Boy que se lanzó al mercado en 1989 con el adictivo juego de Tetris, a la que le seguiría la SEGA Game Gear, la consola portátil más potente vista en el mercado hasta entonces (1991), con un catálogo de 300 juegos.

En 1991, Super Nintendo (también llamada Super Nes) tuvo los primeros videojuegos totalmente tridimensionales y, en 1996, apareció Virtual Boy (acaso el mayor fracaso de Nintendo), que usaba un proyector de estilo gafas para 3D.

Un quiebre en esta historia es la aparición -en 1995 en Japón- de la Playstation, una consola que cumplió 20 años y que fue pionera en el empleo de CD Rom: Sony vendió cien millones de unidades en una década y Fifa Football fue su último título.

La última sala del recorrido está dedicada a algunas de las consolas que utilizan hoy los amantes de los videojuegos: allí se ve la Playstation 3, aparecida en 2006 también en Japón, para competir con la Xbox 360 de Microsoft -que permite a los jugadores competir on line- y la Wii de Nintendo, cuyo rasgo más distintivo es su control inalámbrico para los deportes.

Desde las imágenes rudimentarias de los primeros videojuegos hasta los actuales, mucho más reales, estos dispositivos son y han sido siempre para divertirse y el factor más importante se encuentra en la imaginación, detrás de los controles.

Se podrá visitar y participar de la exposición «Play the game» hasta el 30 de mayo, de lunes a sábados de 14 a 20.30, en el espacio de Arenales 1540, con entrada libre y gratuita.

Fuente: Minuto Uno