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El próximo domingo Marita Verón, desaparecida desde 2002 por una red de trata de personas, cumple 36 años y su hija, Micaela, eligió la música para recordarla, con un recital que se realizará el sábado en su natal Tucumán.

«para que seamos conscientes de que se llevaron a mi mamá como se pueden llevar a cualquier otra chica».

Así lo expresó la adolescente en diálogo con Télam, al cumplirse hoy el segundo aniversario del fallo judicial que dejó libre a los acusados haber desaparecido a su madre.

Micaela cumplió 15 años el 3 de diciembre, pero no festejó su cumpleaños, en realidad «no festejamos con mi familia en ninguna fecha, no tenemos ánimo. Se que eso no me devuelve a mi mamá. Lo que hacemos es conmemorar, como lo del sábado, que permite que desde el escenario, las bandas de música, digan ‘No a la trata'».

Hace dos años, el 11 de diciembre de 2011, la Sala II de la Cámara Penal de Tucumán absolvió a los 13 imputados por la desaparición de Marita, fallo que fue revocado parcialmente por la Corte tucumana que condenó a 10 de los acusados.

El recital «también es para pedir justicia, porque no estoy conforme con lo que hicieron los jueces. Yo quiero que vayan presos lo que tienen que estar presos, porque las pruebas de los que secuestraron a mi mamá, están», dijo contundente la adolescente.

Para Micaela, que tenía tres años cuando desapareció su mamá, es «normal hablar de trata, de violencia de género…son temas tan duros que a veces me agoto, pero me recupero cuando me siento a tomar mate con las sobrevivientes que están en la Fundación y las veo sonreír».

Ella se refiere a la Fundación María de los Ángeles que creó su abuela, Susana Trimarco, para asistir a mujeres sobrevivientes de la trata y a sus hijas e hijos.

«Me gusta ir al jardín maternal de la Fundación y estar con los nenes, jugar a la pelota con ellos, verlos felices…vienen de historias tan duras», reflexiona esta niña-mujer que se crió recorriendo pasillos judiciales y lugares oscuros junto a su abuela en la búsqueda de Marita.

Pinta, toca el saxo, escribe, saca fotos, cursa el secundario y acompaña a las víctimas y sus hijos, rutina que ea califica como «mi militancia diaria, pura» que le permite ser una adolescente a la que sus pares consultan sobre la trata «porque, si no lo vivís, parece de ciencia ficción que tu mamá sea raptada y desaparecida».

A través de Facebook y Twitter, ella activa su militancia, recibe denuncias, asesora adonde pueden recurrir familiares de víctimas «y muchos chicos que hacen trabajos para la escuela sobre el tema, me consultan», compartió.

Si bien «no deja de sorprenderme la perversidad de algunas personas, como las que secuestraron a tres chicas chinas que llegaron a la Fundación con un rastreador que le habían puestos sus captores, tampoco deja de sorprenderme cómo lograron comenzar a sonreír».

Desde su mirada adolescente «hay que concientizar con buena onda, por eso la música», resumió, que se concreta en recitales que organiza desde el año 2007 para algunas fechas claves, como el aniversario de la desaparición de su madre o el día de su cumpleaños.

El próximo sábado, a partir de las 19.30, subirán al escenario montado en la Plaza Independencia de la capital tucumana La Franela, Hilda Lizarazu, Los Cafres, Nonpalidece, las bandas locales Rock and Lobos y Fulanos, donde toca el hermano de Marita, más los mendocinos de Hormigas Negras.

Durante este festival ‘Yo digo no a la trata de personas’ se proyectarán spots dedicados a la prevención e información sobre este delito y en los alrededores de la plaza habrá stands dedicados a brindar información sobre la temática.

El compromiso de Micaela queda estampado cuando dice: «Mi abuela me crió con la verdad. No quiero vivir en la mentira. Con los años fui creando fortalezas y no analizo tanto lo que me pasó, lo que hago es ayudar, tratar de buscar soluciones y brindarme a las víctimas».

A María de los Ángeles (Marita) Verón se la vió por última vez el 2 de abril del 2002. El domingo 14 de diciembre cumple 36 años.

Fuente: Telam