La Casa Blanca afirmó que EE.UU. está «en guerra contra el EI»

Washington anunció por primera vez la declaración de guerra contra el grupo jihaidista.



No Banner to display

Washington anunció por primera vez la declaración de guerra contra el grupo jihaidista.




La Casa Blanca afirmó hoy por primera vez que Estados Unidos está «en guerra» contra el grupo jihadista Estado Islámico (EI), de la misma forma que lo ha estado contra el grupo terrorista Al-Qaeda y sus afiliados desde los atentados del 11 de septiembre de 2001.

«Estados Unidos está en guerra con EI de la misma manera que estamos en guerra con Al Qaeda y sus afiliados en todo el mundo», dijo el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, en su conferencia de prensa diaria.

En el mismo sentido, el portavoz del Pentágono, el contralmirante John Kirby, indicó también a la prensa que el Gobierno estadounidense «sabe que está en guerra con el EI», el grupo yihadista que lucha en Irak y Siria.

Las afirmaciones suponen la primera vez que la Administración de Barack Obama utiliza el término «guerra» para describir su ofensiva contra el EI, que comenzó hace un mes con ataques aéreos selectivos en Irak y ahora se ha ampliado a una campaña más amplia en ese país y la previsión de próximos bombardeos también en Siria.

Ayer, tanto el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, como la asesora de seguridad nacional de Obama, Susan Rice, evitaron utilizar esa palabra para referirse a la campaña ampliada que este presidente anunció el miércoles en un discurso.

«Si alguien quiere pensar en esto como una guerra contra el EI, pueden hacerlo, pero el hecho es que es una gran operación antiterrorista que tendrá muchas partes diferentes en movimiento», sostuvo Kerry en una entrevista con la cadena CNN.

Pese a recurrir a ese término, Earnest subrayó hoy que la estrategia del Gobierno de Obama es «significativamente diferente a la que se siguió en la guerra de Irak» lanzada en 2003 por la Administración de George W. Bush. «Esta estrategia no la está desplegando Estados Unidos solo, sino una amplia coalición internacional», defendió Earnest.

En su discurso del miércoles, Obama comparó la ofensiva contra EI, que estará basada en ataques aéreos y en la que ha descartado cualquier misión de combate de tropas estadounidenses en Irak o Siria, a las operaciones contra el terrorismo que su Administración ha emprendido en Yemen y Somalia.

No obstante, su asesora de seguridad nacional reconoció hoy que la campaña contra el EI será más amplia que esos esfuerzos, que apenas han motivado un centenar de ataques aéreos en cada país en los últimos años, pero se parecerá en el sentido de que el peso del combate recaerá en las autoridades locales y no en Estados Unidos.

«La frecuencia de nuestros ataques militares será sin duda más intensa en Irak, porque la amenaza es más intensa y más sostenida», señaló Susan Rice en una entrevista con la emisora de radio NPR.

MÁS ATAQUES AÉREOS

Las fuerzas militares estadounidenses lanzaron entre ayer y hoy dos nuevos ataques aéreos sobre las posiciones del grupo jihadista Estado Islámico en las proximidades de la presa de Mosul y en Erbil, la capital del Kurdistán iraquí.

Según informó el Mando Central en un comunicado, los ataques destruyeron dos vehículos armados pertenecientes al EI, con los que las fuerzas estadounidenses ya suman 158 ataques aéreos en todo Irak desde que comenzara la ofensiva contra los yihadistas el mes pasado.

Además, Estados Unidos ha sobrevolado territorio tomado por los yihadistas suníes del EI para lanzar ayuda humanitaria en Amerli y Sinyar, donde las minorías turcomana y yazidí, respectivamente, estaban siendo masacradas y acosadas por los islamistas.

El Pentágono desplegará inmediatamente casi medio millar de asesores militares destinados a capacitar y entrenar a las fuerzas iraquíes y kurdas y comenzará a operar drones y aviones tripulados desde la ciudad kurdo-iraquí de Erbil para combatir al Estado Islámico.

Una vez completado este último despliegue y sumando los militares enviados para garantizar la seguridad de los diplomáticos estadounidenses en Irak, el número de tropas del país norteamericano rondará los 1600, un número inédito desde el fin de la guerra de Irak (2003-2011), hace casi tres años.

CRECIMIENTO EXPONENCIAL

La Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos estima que el grupo jihadista Estado Islámico tiene hasta entre 20.000 y 31.500 combatientes en sus filas, aproximadamente el doble de lo que calculaba antes del mes de mayo, informó un portavoz de la agencia.

Estos números suponen un aumento de al menos 10.000 milicianos en los últimos meses, debido a un «reclutamiento mayor desde junio tras los éxitos (del EI) en el campo de batalla y la declaración de un califato», explicó el portavoz bajo la condición de anonimato.

Más de 15.000 de esos combatientes son extranjeros llegados de más de 80 países a Siria para unirse al EI, 2000 de ellos occidentales, informó una fuente de la CIA a la cadena CNN.

La CIA dio a conocer estas cifras tan sólo 24 horas después de que el presidente de la nación, Barack Obama, anunciara su campaña para frenar al EI, una operación que se amplía ahora a Siria e incluye el envío de 475 militares más a Irak.

Los nuevos datos corresponden a los últimos informes de la CIA, elaborados entre mayo y agosto, un intervalo en el que la amenaza del EI se ha hecho lo suficientemente fuerte como para obligar a Obama a intervenir en Siria, un escenario al que había sido reticente hasta ahora.

Se calcula que más de un centenar de estadounidenses han luchado con grupos rebeldes -no sólo con el EI- desde el comienzo de la guerra civil en Siria hace tres años. Desde enero de este año hasta ahora el número de ciudadanos de EEUU combatiendo en Siria se ha duplicado.

A medida que el EI se ha hecho más fuerte en los últimos meses, más extranjeros se han desplazado a Siria e Irak para luchar en sus filas, lo que ha obligado a las autoridades europeas y estadounidenses a aumentar sus recursos para detenerlos antes de salir de sus países de origen.

Fuente: Lanacion.com.ar