No Banner to display

El Instituto Nacional de Semillas (Inase), un organismo descentralizado de la Secretaría de Gobierno de Agroindustria de la Nación, estableció las condiciones para las actividades de producción, difusión, manejo y acondicionamiento en invernáculos y/o predios de seguridad de cannabis sp.

Con la resolución 59/2019, publicada en el Boletín Oficial, el organismo se hace eco de la ley 27.350 del uso medicinal de la planta de cannabis, que delega en este ente las condiciones para la producción.

En rigor, toda autorización deberá pasar por el organismo. «No se podrá realizar ninguna actividad de producción, difusión, manejo, acondicionamiento e importación sin la previa autorización del Instituto Nacional de Semillas», precisa su primer artículo.
Según el Inase, para hacer actividades con cannabis en invernáculos o predios de seguridad se deberá contar con un responsable técnico.

«La función del responsable técnico es declarar el procedimiento de producción del cultivo, movimientos y guarda de semillas dentro del predio, presentando un registro de producción del mismo», sostiene. Luego agrega que ese responsable técnico deberá ser un profesional del área de la producción agrícola o de la investigación científica en el área vegetal «que esté en conocimiento de las normativas en producción de este cultivo en particular y sus requisitos».

Ese responsable también deberá llevar un libro de existencias y de actividades. Por otra parte, el organismo fijó que el germoplasma de cannabis «provendrá directamente del laboratorio o institución en donde se haya generado y en todo momento deberá permanecer dentro del invernáculo o predio». Si hay un traslado se hará con medidas del Ministerio de Seguridad.

En este contexto, el año pasado el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, y Juan Balbín, Presidente del INTA, firmaron un convenio de cooperación técnica y científica para producir cannabis en una finca con fines científicos, medicinales y terapéuticos. El acuerdo tiene una duración de 10 años y establece que el INTA aportará el conocimiento científico y la provincia los recursos económicos y físicos.

Fuente:

La Nación