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El llamado al 911 alertó sobre un asalto a un supermercado. Para cuando los patrulleros llegaron al lugar, los dos ladrones estaban por subirse al coche donde los esperaba una cómplice y respondieron a los tiros a la voz de alto. Lograron huir, pero no fueron muy lejos. Tras una persecución, los detuvieron y allí llegó la sorpresa: la mujer que conducía el auto resultó ser policía de la Bonaerense y estaba con su hijo de 2 años.

El arresto de la oficial Viviana Abigail Tula Bascarán, de 23 años -que trabaja en la subcomisaría de la localidad bonaerense de Rawson, en el partido de Chacabuco-, ocurrió antes de la medianoche del sábado pasado. Los dos ladrones que cayeron junto a ella tienen antecedentes penales por diversos robos.

Todo sucedió en la ciudad de Chivilcoy, a unos 160 kilómetros del centro porteño. Habían pasado apenas unos minutos de las 23 del sábado 1° de septiembre cuando la Policía fue alertada por un asalto en el autoservicio “Cristina”, ubicado en el cruce de la Avenida De Tomaso y 508.

Cuando los patrulleros llegaron al lugar, los dos ladrones salían con el botín. En la puerta los esperaba un Chevrolet Corsa conducido por una mujer, pero no llegaron a subirse al coche: los agentes dieron la voz de alto y los delincuentes respondieron a los tiros.

Los tres huyeron en diferentes direcciones pero fueron cayendo de a uno. A seis cuadras del comercio asaltado, la Policía logró interceptar el Corsa y detener a la oficial Tula Bascarán. La mujer no estaba sola: iba con su hijo de 2 años.

Tula Bascarán pertenecía a la Policía Bonaerense y ya fue desafectada por la Auditoría General de Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad. Ahora también es investigada por otros robos en localidades cercanas, según confiaron a Clarín fuentes de la investigación.

Luego arrestaron a Ricardo Antonio Coquiz (48), quien estaba escondido en el techo de una casa a la vuelta del autoservicio asaltado. A él le secuestraron un revólver calibre .38.

“Coquiz es un viejo conocido de la Policía, tanto él como los miembros de su familia tienen numerosas causas en la Justicia”, explicaron las fuentes.

En efecto, Coquiz tiene tres causas penales por “robo calificado” en Trenque Lauquen y Mercedes, más dos por “evasión”.

El otro detenido, también cayó a la vuelta del comercio asaltado pero estaba escondido en el interior de una casa. Se trata de Daniel Oscar Reynaldo, de 47 años y de Moreno, quien también tiene antecedentes.

Las fuentes detallaron que a Reynaldo le secuestraron una pistola Glock calibre .9 milímetros que había sido robada en la localidad de Carlos Casares, por lo que se le suma el delito de “encubrimiento” a la calificación que afronta junto a sus dos cómplices: “robo calificado por el uso de arma, portación ilegal de arma y munición de guerra, privación ilegal de la libertad, resistencia a la autoridad y lesiones leves”.

Además del coche y las armas, la Policía les secuestró dos bolsas de consorcio con 84.492 pesos, U$S 24, 2.000 Guaraníes, 1.000 pesos chilenos, 50 pesos mexicanos y 5.200 pesos uruguayos, más cheques de terceros. Y también les incautó: 20 chorizos secos, una horma de queso, 360 atados de cigarrillos de distintas marcas, varios medicamentos, pilas, encendedores, papel de cigarrillo, tres celulares y hasta maquinitas de afeitar.

Investiga el caso, la ayudantía fiscal de Chivilcoy, a cargo de Bárbara Leranoz, bajo la supervisión de la UFI N°3 de Mercedes, del fiscal Pedro Illanes, quien este lunes por la tarde indagará a los detenidos.

Fuente: Clarín