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«Nuestra vida es en tres dimensiones, en ciudades con rascacielos y oficinas gigantes, muchas veces en sitios distantes, pero nuestro transporte aún está en dos dimensiones y debemos cambiar eso», aseguró Nikhil Goel, jefe de productor de la división Elevate de Uber.
Es por eso que los nuevos esfuerzos de la compañía, que informó tener en la actualidad más de 93 millones de usuarios en 700 ciudades alrededor de 63 país a poco menos de diez años de haber sido fundada, estarán puestos en el aire, con más y más opciones para realizar vuelos cortos.
Se trata de un panorama multi-vehicular, con varias empresas trabajando en la construcción de distintos vehículos voladores que se integrarán con la oferta actual de autos y bicicletas de la compañía.
Para Uber las tres prioridades de sus vehículos aéreos -que fueron presentados como «autos voladores» con imágenes de la vieja serie animada Los Supersónicos– son la sustentabilidad, ya que todos serán eléctricos y ecológicos; el silencio, con motores que no molesten a los vecinos que tengan pistas cerca de sus casas o incluso en la terraza de sus edificios; y seguros, con la prioridad puesta en evitar cualquier tipo accidente.
Al igual que con el servicio de autos y bicicletas, Uber no construirá los vehículos sino que firmó acuerdos con las compañías Bell, Karem Aircraft, Pipistrel y Boeing, quienes trabajarán juntas para lograr la proeza mecánica, técnica y digital de traer a la vida el viejo sueño de volar en auto.
