Tras la condena a Los Monos, volvieron los ataques contra edificios judiciales en Rosario

Ambos ocurrieron de madrugada, con pocos minutos de diferencia. “Con la mafia no se jode”, fue el mensaje que volvió a repetirse.



No Banner to display

Motociclistas armados y con la cara cubierta se encargaron esta madrugada de retomar una serie de ataques intimidatorios que parecía desactivada hace algunos meses en Rosario, cuando se registraron las últimas balaceras contra edificios oficiales y viviendas de magistrados. Este lunes a primera hora hubo dos nuevos atentados contra el Centro de Justicia Penal y los Tribunales provinciales, las principales sedes del Poder Judicial de Santa Fe en la ciudad.

La cautela con la que se manejó la información oficial sobre la investigación a primera hora contrastaba con el despliegue del personal encargado de terminar de romper y reponer los cristales destrozados por los proyectiles en la esquina de Rueda y Mitre.

El ataque contra las instalaciones del fuero penal ocurrió alrededor de las 2.40. Diez minutos antes, un llamado al 911 había alertado sobre disparos efectuados en una secuencia similar contra el acceso más transitado del palacio ubicado en Balcarce y Montevideo, ubicado a poco más de veinte cuadras de allí.

Voceros del Ministerio de Seguridad de Santa Fe confirmaron el secuestro de vainas servidas en ambos sitios. «Con la mafia no se jode«, fue el cartel de episodios anteriores que esta vez se repitió en los Tribunales.

Alertado por la situación que parece reactivar una saga de 14 atentados registrados entre fines de mayo y mediados de agosto, el titular de la cartera, Maximiliano Pullaro, indicó: «Estos ataques a edificios de la justicia, al igual que los anteriores, no quedarán impunes«.

«En los últimos días avanzamos sobre los núcleos económicos de las bandas y vamos a continuar golpeando sus diversas actividades«, recordó el ex diputado provincial a pocos días del fallo federal que incluyó penas de entre 15 y 17 años de prisión para «Los Monos» en la primera condena a esa organización por tráfico de drogas.

Uno de los mensajes en los ataques intimidatorios contra sedes judiciales en Rosario.

Si bien algunos de sus miembros y allegados quedaron vinculados a buena parte de las amenazas previas a funcionarios judiciales a partir de la imputación a Ariel Máximo «Guille» Cantero como instigador, el panorama sobre la actividad de las organizaciones delictivas complejas parece haberse modificado en los últimos meses a partir de una serie de crímenes que refieren a la actividad de otros grupos con diferentes intereses.

Rosario. Corresponsalía.

Fuente: Clarín

 



Articulos relacionados