Meghan Markle y Harry, otra vez en el centro de las críticas: ahora por los «escandalosos» millones que gastaron en su nueva casa

Los duques de Sussex destinaron más de 2 millones de libras de fondos públicos en la reforma de la propiedad ubicada en los terrenos del castillo de Windsor



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Las labores de renovación de la nueva casa del príncipe Harry y Meghan Markle, que se prolongaron por seis meses, costó 2,4 millones de libras de fondos públicos (USD 3,05 millones), según las cuentas anuales de la familia real británica, publicadas este martes.

Como cada año, Buckhinham Palace publicó los gastos a los que ha hecho frente la familia real británica y la lista habría pasado desapercibida de no ser por los 2,4 millones de libras públicas que costó la reforma de Frogmore Cottage, la nueva casa de los duques de Sussex.

Todo indica que los duques de Sussex enemistados con el príncipe  William y su esposa Kate Middleton decidieron dejar el palacio de Kensington para irse a Windsor.

Frogmore Cottage, una residencia compuesta de cinco unidades separadas muy cerca del castillo de Windsor, a unos 34 kilómetros al oeste de Londres, se convirtió en una sola propiedad para que vivan los duques de Sussex y su bebé Archie, nacido el 6 de mayo.

«Las infraestructuras obsoletas fueron sustituidas para garantizar el futuro a largo plazo de la propiedad«, que data del siglo XIX, justificó en rueda de prensa el encargado de la gestión de las cuentas reales, Michael Stevens.

Las obras incluyeron el remplazo de las defectuosas vigas de madera del techo que tenía la propiedad y de las del suelo, así como la actualización de ineficientes sistemas de calefacción. La casa también requirió grandes renovaciones en su instalación eléctrica y la instalación de cañerías de gas y agua.

Fuente: Infobae