Malvinas: confirman que hay tumbas mal identificadas en el cementerio de Darwin

Una denuncia sobre irregularidades en el cementerio de Darwin resultó fundada. Así lo prueba el resultado de cotejo de ADN que demuestra que el soldado Héctor Walter Aguirre no está enterrado en la tumba que lleva su nombre y la de tres caídos más, sino en otra que tenía una placa con la inscripción «Soldado argentino solo […]



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Una denuncia sobre irregularidades en el cementerio de Darwin resultó fundada. Así lo prueba el resultado de cotejo de ADN que demuestra que el soldado Héctor Walter Aguirre no está enterrado en la tumba que lleva su nombre y la de tres caídos más, sino en otra que tenía una placa con la inscripción «Soldado argentino solo conocido por Dios».

La noticia da sustento a la sospecha de que en el cementerio argentino de las islas Malvinas habría cinco sepulturas que llevan nombres de 12 personas que no son las que allí yacen.

Los familiares en el cementerio de Darwin
Los familiares en el cementerio de Darwin Crédito: Víctor Bugge / Secretaría de Derechos Humanos

El cuerpo de Aguirre fue identificado por el cotejo de las muestras de ADN entregadas por sus familiares con los restos de tumbas anónimas, marcadas con placas con la leyenda «Soldado argentino solo conocido por Dios». La operación se encuadró en el Plan Proyecto Humanitario (PPH) acordado entre Argentina y Gran Bretaña para identificar a los soldados argentinos enterrados en tumbas anónimas.

Los nombres de Aguirre, Sevilla y Luna aparecieron luego de la remodelación del cementerio, en 2004, en las placas de granito que se colocaron en lugar de las cruces de madera originales.

Cristina Lera Madre de Luis Sevilla Ex combatiente de Malvinas
Cristina Lera Madre de Luis Sevilla Ex combatiente de Malvinas Fuente: LA NACION – Crédito: Javier Corbalán

El tema podría haber quedado en la nada, ya que las familias de estos soldados son gente humilde, varios de ellos del Norte argentino, sin recursos económicos para reclamar en Buenos Aires.

Alicia Panero, una profesora de Historia de Córdoba e investigadora de la guerra, se enteró de lo que sucedía, estudió los casos, comparó los planos del cementerio que dejó Cardozo con los actuales, chequeó nombres y sitios donde habían sido encontrados los cadáveres y llegó a la conclusión de que los familiares tenían razón: no había registro alguno de que esos caídos hubieran sido ingresados al cementerio después de 1983, o de que hubieran sido identificados de alguna manera. La aparición de los nombres no tenía explicación. En total, registró 12 casos similares en cinco tumbas. Finalmente, presentó una denuncia en los tribunales federales de Córdoba. En esa denuncia, que hoy se encuentra en Comodoro Py, reclama a distintos funcionarios nacionales y a la Comisión de Familiares de Caídos en Malvinas e Islas del Atlántico Sur (la ONG encargada de la administración y mantenimiento del cementerio desde 1983) que esclarezcan la situación. A partir de ese momento, y con la ayuda de las secretarías de Derechos Humanos de Santiago del Estero, Salta y Chaco, se aceleraron los tiempos. Se tomaron las muestras de ADN de tres familias (Aguirre, Sevilla y Luna) y el de ayer es el primer resultado que se conoce.

Fuentes de la Secretaría de Derechos Humanos de La Nación señalaron que hoy harán públicas nuevas notificaciones sobre la identificación de caídos en Malvinas.

Fuente: La Nación 

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