La pobreza en la Ciudad bajó al 14,9% en el primer trimestre

El nivel de pobreza en la Ciudad de Buenos Aires bajó al 14,9% en el primer trimestre, desde el 17,6% registrado en igual período de 2016, anunció este jueves la Dirección General de Estadísticas y Censos porteña. En tanto, el nivel de indigencia retrocedió al 4%, desde el 5,4% de un año antes, agregó el […]



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El nivel de pobreza en la Ciudad de Buenos Aires bajó al 14,9% en el primer trimestre, desde el 17,6% registrado en igual período de 2016, anunció este jueves la Dirección General de Estadísticas y Censos porteña.

En tanto, el nivel de indigencia retrocedió al 4%, desde el 5,4% de un año antes, agregó el organismo porteño.

A su vez, el porcentaje de hogares en situación de pobreza en redujo en 2,1 puntos durante en comparación con igual período del año pasado.

La Dirección General de Estadística y Censos del Gobierno de la Ciudad, publicó el informe sobre las «Condiciones de vida: Incidencia de la indigencia y de la pobreza y estratificación».

«El informe señala que, en comparación con el mismo período de 2016, durante este primer trimestre de 2017 el porcentaje de hogares en situación de pobreza se redujo 2,1 puntos, pasando del 12,3% medido en el primer trimestre de 2016 al 10,2% registrado en el primer trimestre de este año», señala el informe oficial.

Los sectores medios asociados a la «clase media» representan más de la mitad de los hogares de la CABA, al totalizar 714.000 hogares y 1.608.000 personas.

En cuanto al estrato más bajo de la estructura, la indigencia alcanza al 2,9% de los hogares (37.000 hogares) y al 4% de las personas (123.000 personas), mientras que la pobreza (indigente y no indigente) es de 10,2% de los hogares (132.000 hogares) y de 14,9% para las personas (456.000 personas).

Entre los estratos que no alcanzan con sus ingresos la línea de pobreza y la «clase media», se ubican los estratos No pobres vulnerables (7,6% de los hogares y 8,2% de las personas) y el Sector medio frágil (9% de los hogares y 9,3% de las personas).

«A los primeros se los considera vulnerables porque ante una eventual disminución de su poder adquisitivo (por ejemplo, por una suba de precios por encima de sus ingresos o por una reducción de horas de trabajo) o ante la pérdida del empleo o del ingreso de alguno de sus miembros, tienen alta probabilidad de caer en los estratos más bajos», explica a continuación.

Por último, los sectores acomodados representan el 17,9% de los hogares y el 15% de las personas en el período.

Al comparar este primer trimestre del 2017 con el período inmediato anterior (cuarto trimestre de 2016), se observa la reducción en la proporción de hogares y personas en situación de pobreza (3,1 puntos porcentuales y 4 puntos porcentuales, respectivamente). «En particular, hubo una leve mejora en los hogares y personas en condición de pobreza extrema», señala el estudio.

En el otro extremo, creció la participación de los hogares que integran los Sectores acomodados, al pasar de 14% a 17,9%.

Por otra parte, el peso del conjunto de hogares formado por el Sector medio frágil y el Sector medio (asociado a la «clase media»), se mantiene estable, en casi dos tercios del total, debido a los incrementos interanuales de los ingresos de los hogares combinados con registros inflacionarios más moderados observados en el primer trimestre de 2017.

En la comparación de los ingresos de los hogares respecto del primer trimestre de 2016, se destaca el aumento de los perceptores y de los valores correspondientes a transferencias monetarias (especialmente AUH) que afectaron a los primeros quintiles de la distribución.

En ese sentido, el informe menciona además los incrementos en los ingresos por jubilaciones y pensiones por el cobro de la Reparación Histórica.

«El incremento de la tasa de empleo» y con ella la relación entre perceptores de estos ingresos en el hogar y no perceptores- impactó en una suba más moderada de los ingresos laborales, a la que también contribuyó la expansión de la base de perceptores de asignaciones familiares y montos por un cambio en las escalas y los topes para los asalariados», consignó el informe, que suma como factor de aumento de estos ingresos la ampliación del derecho a la asignación por hijo de los monotributistas (categorías B a I) desde mayo de 2016.

Paralelamente, las mejoras se observan en los extremos de la distribución del ingreso: por un lado, descendieron en 2,1 puntos porcentuales los hogares en situación de pobreza por caídas tanto en la indigencia como en la pobreza no indigente; y por el otro, se expandieron moderadamente los sectores medios.

Fuente: Ámbito Financiero

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