De todos modos, el oficialismo ya reafirmó que no modificará el cuadro tarifario y el jefe de Gabinete, Marcos Peña, criticó las iniciativas legislativas que buscan anular los aumentos de tarifas de los servicios públicos al señalar que en el Gobierno no están «abiertos a ceder a la demagogia», pero aclaró que «es difícil sincerar el sistema tarifario después de tantos años de mentira y destrucción del sistema energético».
El ministro coordinador resaltó: «Hay que debatir y defender las propuestas» sobre la política tarifaria. «Daremos la discusión y vamos a defender la racionalidad».
La comisión de Presupuesto y Hacienda se reunirá el miércoles a las 14, y deberá expedirse sobre el dictamen de las comisiones de Obras Públicas y Defensa del Consumidor al proyecto opositor. Hasta ahora, y si se mantiene unida la oposición, el interbloque Cambiemos no podrá frenar el intento opositor de emitir dictamen y aprobarlo en una sesión especial que se haría el 9 de mayo para girarlo al Senado que, en caso de hacerlo ley, se encontraría con el veto del Ejecutivo.
El proyecto, conocido como «tarifas razonables», establece que las empresas proveedoras de servicios deberán generar un crédito a favor del usuario si las tarifas a partir del 1° de noviembre de 2017 aumentaron más que el índice de precios mayoristas del INDEC o que los salarios, y también que se reduce el IVA de las facturas, de 21% a 10,5%, y se elimina la alícuota especial de 27% de IVA para consumo de servicios públicos de pymes. Cambiemos repetirá los argumentos esgrimidos por Luciano Laspina, de que la oposición tendrá que «decir si se aumentan los impuestos o el endeudamiento» para cubrir el costo de los proyectos impulsados por los bloques opositores.