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La pandemia por el coronavirus que mantiene en vilo al mundo ya lleva más de 417.000 casos de contagio y más de 18.000 víctimas fatales. La gravedad en la que se fue tornando la situación impulsó a que, algunos antes y otros después, de los 185 países afectados anuncien una batería de medidas restrictivas para enfrentar al Covid-19, decisión que tomó por sorpresa a aquellos argentinos que estaban diseminados en distintas partes del mundo que ahora se ven imposibilitados de poder regresar al país.
Al momento en que los vuelos comerciales comenzaron a ser cancelados por el cierre de fronteras, se estima que había unos 25 mil argentinos en el exterior. Sin embargo, esta cifra se encuentra en permanente ascenso, porque con el correr de los días surgen nuevos reclamos a Cancillería de aquellos que piden volver al país. Todos en situaciones diversas, pero compartiendo el mismo miedo e incertidumbre de no obtener respuesta acerca de la fecha en la que podrán estar en sus hogares.
Tal es el caso de Diego Meinardi, de 42 años, oriundo de la ciudad de Rosario, que junto a su esposa y su hijo de 14 años se subieron al avión el pasado 4 de marzo luego de programar durante meses su viaje con rumbo a Reino Unido, con fecha de vuelta para el 26 de marzo. «Cuando salimos de Argentina había unas restricciones de China al resto del mundo, pero en Gran Bretaña no había ninguna medida en ese entonces, ni se hablaba de coronavirus», explica Diego a Crónica.com.ar.
Pocos días después, la situación mundial se tornó crítica respecto a las consecuencias causadas por la propagación del Covid-19. Reino Unido ya lleva alrededor de 8.077 casos de contagios y 422 muertes, razón por la que la mayoría de vuelos a Argentina fueron cancelados. Es así que habría alrededor de 200 argentinos en Reino Unido que buscan poder regresar a su país, y hasta el momento no reciben respuestas. Los días pasan y el miedo y la incertidumbre crece, no sólo por los riesgos de salud a los que están expuestos, sino por el costo económico diario que implica la vida en Londres, donde gastan más de diez mil pesos por día entre hospedaje y comida.
La preocupación no sólo es para los argentinos que están afuera, sino también para sus familias que están a la espera de la última información sobre sus seres queridos. «Estamos enloquecidos», dice a este medio Silvia Charito, mamá de Federico, quien junto a su pareja Yessica Pezzuti luego de mucho esfuerzo ahorraron para irse de viaje de luna de miel a Londres a principios de marzo, de donde no pueden retornar. Luego de adelantar el pasaje de regreso, el intempestivo cierre del aeropuerto de Brasi obligó a que tuvieran que cambiar sus planes y fueran trasladados hacia Londres nuevamente.
Pese a que Italia y España se convirtieron en los países más afectados, en el Reino Unido demoraron en aplicar las medidas restrictivas, ya que recién este lunes fue declarada la cuarentena obligatoria por tres semanas.
Cruzando el Océano Atlántico, Julieta Mangano y su novio Franco Giacalone viven la misma situación de desasosiego por estar lejos de casa y sin certezas. Llegaron a México el 2 de marzo con fecha de vuelta para el 20 de ese mismo mes, sin imaginar que un día antes de emprender su regreso la empresa aérea Aero México les cancelaría su vuelo, que fue reprogramado para el 17 de abril.
Ante tal noticia se dirigieron al aeropuerto donde les informaron que la única compañía aérea que está en funcionamiento es Aerolíneas Argentinas, que según sostienen, luego del 27 de marzo no hace más vuelos hasta mayo, «y solamente viajan quienes tengan boletos ya pagos con esa compañía, los demás no tienen forma de volver», cuenta Franco a Crónica. com.ar. Por otro lado, ambos destacan la solidaridad con la que se encontraron por parte del pueblo mexicano que se acercó a prestar colaboración. «La única ayuda que estamos recibiendo es la de mexicanos que se enteraron de lo que estamos viviendo, y nos vienen a traer mantas y comida».
La pareja de jóvenes realizó un video para visibilizar el difícil momento que atraviesa. Además, detallan que afortunadamente consiguieron hospedaje a través de un amigo, pero que la mayoría de las personas duermen en el aeropuerto porque no tienen ahorros para seguir sustentando más días en el extranjero.
Asimismo, en Dinamarca, alrededor de 150 argentinos reclaman ayuda a las autoridades para poder regresar a la Argentina. En diálogo con Crónica.com.ar, Agustín Moral cuenta que junto a su novia viajaron al país escandinavo con una visa de trabajo a fines de mayo del año pasado, con fecha de regreso para el 27 de marzo. Sin embargo, en medio de la pandemia se encontraron con que su vuelo había sido cancelado. La situación se torna aún más desesperante ya que no hay trabajo porque la mayoría de los locales y comercios están todos cerrados, aunque aún no fue declarada la cuarentena obligatoria. Además, dadas las medidas tomadas el aeropuerto de Copenhague, Aerolíneas Argentinas tampoco opera.
«Desde el consulado nos dicen que busquemos alternativas para volver. El problema es que esas alternativas a veces ascienden a pagar billetes de avión por más de 1500€, y hay gente que ha podido hacerse del dinero y conseguir un lugar, y sin embargo a mitad del viaje en alguno de los tantos aeropuertos en donde realizaban conexión, les han cancelado los vuelos y se han quedado varados», dice Agustín.
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