«Busca de una forma deliberada esconder la verdad al Senado y al pueblo estadounidense, porque él sabe que las infracciones del presidente son indefendibles y exigen su destitución», dijo en un comunicado la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi.
Los senadores deben decidir sobre los cargos que la Cámara baja, controlada por los demócratas, le imputó a Trump el mes pasado: abuso de poder y obstrucción al Congreso.
Según la acusación, el magnate intentó presionar a Ucrania para que interfiriera en las elecciones de 2020 en su favor, sugiriendo a su homólogo Volodimir Zelenski que investigara los negocios del hijo de Joe Biden, quien podría ser su rival demócrata en las presidenciales de noviembre.
Después, según los opositores, obstruyó el trabajó de la investigación en el Congreso al negarse a que sus principales asesores testificaran.
El proyecto de resolución propuesto por McConnell contempla que cada parte tenga un total de 12 horas en dos días para presentar sus argumentos. Eso haría el proceso significativamente más corto que el juicio político contra Bill Clinton.
Los demócratas criticaron con dureza este formato. El legislador demócrata Adam Schiff, a cargo de la acusación contra Trump, dijo que los republicanos buscan celebrar un proceso «amañado» reduciendo su duración y extendiendo las audiencias hasta muy tarde en la noche.
La Casa Blanca espera que el juicio finalice en dos semanas. Si así fuera, serían tres semanas menos de lo que se extendió el proceso contra Clinton.
Por otra parte, los demócratas quieren que testifiquen altos cargos del gobierno, como el jefe de gabinete, Mick Mulvaney, y el exasesor de Seguridad Nacional John Bolton, con la expectativa de que aporten detalles de los intercambios de Trump con Ucrania.
Pero McConnell dijo que no va a considerar el tema de los testigos hasta después de las argumentaciones y los intercambios de preguntas.
Se espera que los senadores voten de acuerdo a los lineamientos de su partido. Trump cuenta con el apoyo de la mayoría republicana en el Senado, donde ostenta 53 de los 100 escaños, por lo que el impeachment no tiene visos de prosperar.
Trump no se encuentra este martes en Washington, sino que está en Davos para participar en el Foro Económico Mundial y donde volvió a calificar al proceso en su contra de «una caza de brujas que ha estado sucediendo durante años y, francamente, es vergonzoso».
Fuente: Ámbito