Lacunza se refirió mediante seis posteos en su cuenta oficial de Twitter, a la situación financiera que obligó al gobernador Axel Kicillof a plantear la postergación momentánea de pagos de capital de algunos bonos.
«Volver al mercado voluntario para renovar vencimientos -planteó luego- depende de la credibilidad que generen las políticas futuras».
Según Lacunza, la deuda actual de la provincia, unos US$ 11.160 millones (flotante incluida) «es algo inferior a la de fines de 2015 (US$ 9.400 millones registrados y unos US$ 1.800 millones ‘escondidos’ en las estadísticas públicas: US$ 900 millones con el Bapro; US$ 600 millones a proveedores; y US$ 100 millones a municipios)».
El tercer tuit dice que aun si no quisiera computarse la «deuda oculta» de 2015 (con el Bapro y otros) «entre 2015 y 2019 habría aumentado US$ 1.800 millones, unos US$ 100 por habitante».
Lacunza comparó ese endeudamiento con las inversiones públicas realizadas durante la gestión de Vidal y en la anterior: «en igual lapso se hicieron obras por US$ 6.000 millones (unos US$ 350 por bonaerense), el doble que en el mandato de (Daniel) Scioli».
Fuente: Ámbito