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“Las pruebas no eliminan todos los riesgos, pero al ser combinadas con un período de aislamiento y precauciones diarias como el uso de mascarillas y el mantenimiento de la distancia social, puede hacer que los viajes sean más seguros”, indicó Redfield en un comunicado.

La orden entrará en vigencia el próximo 26 de enero y será pedido a todos los visitantes y a los ciudadanos estadounidenses que regresen al país. El test negativo deberá obtenerse dentro de los tres días previos al vuelo y será entregado a la aerolínea antes de abordar el avión. La alternativa es demostrar que se padeció la enfermedad. Además, los CDC recomendaron realizarse un nuevo test al llegar y aislarse durante una semana.

El 24 de diciembre pasado el país había comenzado a pedir pruebas negativas a todos los que llegaban desde el Reino Unido, luego de que se registrara una cepa más contagiosa en ese país.

Fuente: Haceinstantes.com