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Una familia tipo -dos adultos y dos menores- que vive en Capital necesitó $20.216 para no ser considerada pobre, de acuerdo con las estimaciones difundidas hoy por la Dirección General de Estadística y Censos porteña.
Ese es el valor que el organismo asignó a la Canasta Básica Total (CBT), que incluye alimentos y servicios mínimos, una vara que se utiliza para marcar la línea de la pobreza. El mes pasado, registró un incremento del 2,45% con respecto al mes anterior.
En tanto, los productos que integran la Canasta Básica Alimentaria (CBA) subieron 3,57%. De esta manera, la misma familia tipo requirió un ingreso mínimo de $9.895,99 para no ser considerada indigente.
El incremento en la Canasta Básica Alimentaria se ubicó por encima de la inflación mensual de julio, estimada en el 3,1%, por el Indec. Las principales subas el mes pasado se dieron en los sectores de vivienda y servicios (47%); transporte (40,9%) y comunicación (34%).