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Se constituyó este jueves en el Congreso la Comisión Bicameral de Seguimiento de la Deuda Externa, que será presidida por un nuevo período por el jefe del bloque del Frente de Todos en el Senado, José Mayans.

Como vicepresidente fue designado el diputado del PRO, Luciano Laspina, mientras que como secretarios fueron formalizados el senador fueguino del Frente de Todos Matías Rodríguez y el diputado kirchnerista, Itai Hagman, cercano a Juan Grabois.

Completan como integrantes de la bicameral en representación del Senado los oficialistas Oscar Parrilli, Adolfo Rodríguez Saá, María de los Ángeles Sacnun y Maurice Closs; los radicales Pamela Verasay y Martín Lousteau; el macrista Ernesto Martínez; y Alberto Weretilneck (Juntos Somos Río Negro).

Los diputados que también forman parte de la comisión son Cristina Álvarez Rodríguez, Carlos Heller, Rodolfo Tailhade y Fernanda Vallejos (Frente de Todos); Federico Angelini y Hernán Berisso (PRO), en tanto que resta que la UCR defina sus representantes.

Al presidir la reunión, Mayans destacó que la bicameral deberá expedirse respecto del decreto 250/2020, por el cual el Poder Ejecutivo le pidió al Congreso que se pronuncie en torno a la autorización para las negociaciones de reestructuración de 68.842 millones de dólares.

El formoseño también anunció que convocará al ministro de Hacienda, Martín Guzmán, o en su defecto a otras autoridades de esa cartera para que informen sobre la marcha de las negociaciones con los acreedores de deuda.

A su turno, Heller dijo que «la fuga de capitales» registrada en los últimos cuatro años «es un tema que deberíamos tener muy presente», y en ese sentido señaló que la comisión deberá analizar «exhaustivamente» el informe que está preparando el Banco Central al respecto.

Parrilli, por su parte, pidió investigar «por qué se tomó la deuda que se tomó en dos años; quiénes fueron los prestamistas, quiénes cobraron comisiones, quiénes estuvieron de un lado u otro del mostrador, quiénes se beneficiaron».

En la misma sintonía, Hagman afirmó que la Argentina tiene «un problema serio con la constante salida de divisas, que es la contracara de la deuda y la crisis económica que tenemos, porque todo dólar que se fuga es todo dólar que no se invierte».

Fuente: Ámbito