Confianza, silencio y contención: cómo se gestó el acto de las actrices en el que hicieron la denuncia pública contra Darthés

Hace dos meses, Thelma Fardín fue a una asamblea, presentó su caso y pidió ayuda



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Dicen que fue hace unos dos meses cuando la chica llegó a la asamblea, una de las reuniones que un grupo importante de actrices hacen cada quince días, de esas que empezaron a hacer a partir de la pelea por la legalización del aborto y que, pese a que la ley finalmente no salió, continúan. En el caso de esta joven, era la primera vez que ella iba o al menos la primera vez que la veían y esa tarde justo no eran muchas, no más de 15 o 20. Quienes recuerdan ese momento cuentan que entonces se la vio durante largo rato tímida, «calladita». Y muy joven. Thelma Fardín fue esa tarde a la Asamblea de Actrices Argentinas para pedir ayuda y cuando contó en voz alta lo que le había pasado todas supieron que estaban ante algo gravísimo.

Luego de un largo rato en silencio, Thelma habló. Y dijo algo así como «Vine porque necesito ayuda, tengo que hacer una denuncia en Nicaragua, una denuncia contra un actor que me violó cuando yo tenía 16 años». Tenía que viajar con su abogada y un acompañante a Managua y no tenía los medios para hacerlo. Esa misma tarde dijo también que no quería ir a sentarse a un programa de TV a contar lo que le había pasado, que su idea no era exponerse. En medio del shock, llegaron las preguntas de sus colegas y ahí se supo el nombre del actor denunciado: Juan Darthés. Otra vez Juan Darthés, pensaron todas.

Otra vez. Ya habían recibido denuncias de cuatro o cinco personas, que sumaron relatos de abusos por parte de Darthés, con varias coincidencias. Aunque no las sorprendió, lo que fue un balde de agua fría fue la gravedad del relato de la joven actriz de Patito Feo. Escenario: una menor de edad que está fuera de su casa, en otro país, de gira, en una situación en la que claramente está en inferioridad de condiciones. Un compañero de trabajo más poderoso y mucho más grande: eso es claramente abuso de poder. «Abuso de poder es decirle al otro ‘hago esto porque puedo y porque nunca te vas a atrever a denunciarme'», explican.

«No tuvimos dudas, no había ni hay grises en esta historia. Otras veces ante alguna denuncia nos preguntamos qué hacemos y no siempre nos ponemos de acuerdo», le contó a Infobae Julieta Ortega, quien estaba esa tarde en la que todas sintieron escalofríos. Otras veces no llegan a un consenso, en esta oportunidad nadie dudó. «No era acoso, la denuncia era grave, ella tenía 16 años, fue abuso sexual. Por todos lados sentimos que todo era de una contundencia indiscutible», sigue Ortega. «En este caso además había un vínculo de confianza», señala Andrea Pietra. «Es el adulto con poder quien le quema la cabeza a la víctima para hacerle sentir que quiso cuando en realidad no quiso».

Fue en uno de los múltiples chats por los que se comunican las casi 400 actrices que integran el colectivo Actrices Argentinas –la colectiva, la llaman ellas- que Dolores Fonzi sugirió el modo de proteger a Thelma. La idea entonces fue ayudarla económicamente para que pudiera viajar con su abogada y un acompañante para que una vez que volviera con la denuncia penal radicada en Nicaragua, y antes de que todo se filtrara a la prensa, llevar adelante una acción para no dejarla sola. Fue así que surgió la idea de llamar a conferencia de prensa para «que se sintiera abrazada y armarle un colchón de contención. Todavía hoy es una chica muy joven», dice Ortega.

«La idea de ir todas juntas y mostrarnos fue para que a Thelma no le sucediera lo de Calu (Rivero): una piba sola denunciando y toda la sociedad juzgando a la víctima», explica Dolores Fonzi. «Venimos de hace mucho tiempo con esto, hubo mucho trabajo en muchas comisiones y siempre procuramos escuchar a Thelma y atender sus necesidades. Ella se mostró todo el tiempo prudente y consciente de sí misma». Tan pendientes estuvieron de acompañar a la actriz que denunció a Darthés que acordaron dejar en sus manos el video que ayer se mostró durante la conferencia de prensa. «Lo hizo Thelma con amigos que la ayudaron. Confiamos en ella y en su criterio y la dejamos para que hiciera lo que le pareciese lo mejor», cuenta Fonzi.

El silencio fue un acuerdo general: había que proteger a Thelma. Y salvo alguna pequeña filtración, fue un pacto que se respetó. La consigna («Mirá cómo nos ponemos») que ahora circula por todas las redes sociales surgió entre varias propuestas pero fue la propia Thelma quien aportó esa idea final. «Todas las chicas que lo denunciaron decían lo mismo, que él les decía a ellas ‘Mirá cómo me ponés’,», le contó a Infobae Melania Buero, recordando este proceso. «Él las culpabilizaba a ellas. Y entonces nosotras le respondemos «Mirá cómo nos ponemos: juntas y organizadas'», dijo la actriz.

Para Ortega, este momento puede funcionar como una bisagra también en relación al trabajo de los chicos actores. «Hay un montón de cosas que no ayudan, que están mal, y eso que en este caso, Thelma era de las más grandes del elenco. Tiene que haber otro tipo de regulación para esos casos, deben ser más los mayores a cargo. Creo que a partir de esto, muchos empiezan a tomar conciencia de que hay un montón de cosas que no están ajustadas y que permiten que estas cosas sucedan».

«A partir de hablar y de sacar a la luz todas estas cosas que están ocultas -y que por eso siguen sucediendo- vamos a cortar con este modus operandi de abuso que, además, hace sentir culpable a la víctima, que por eso no puede hablar: se siente responsable del hecho.», piensa Pietra, que al mismo tiempo no puede dejar de pensar en los más chicos.

«Mi hija de 8 años vio el testimonio varias veces, no evité que lo viera. Creo que acciones como estas ayudan a fortalecer el diálogo con sus padres, le sirven para para saber cuáles son sus derechos. Esto se enseña en la ESI (Educación Sexual Integral) y por eso es fundamental reformular el pedido para que haya ESI en todas las escuelas. Es ahí donde se les enseña a los chicos sus cuáles son sus derechos y sus límites, además del respeto por su cuerpo a rajatabla», insiste Pietra.

Para Julieta Ortega, la posibilidad de que rostros y nombres conocidos le dieran luz a esta denuncia puede aportar a «que la sociedad empiece a tener conciencia de estos temas y que los hombres que tienen poder y abusan de ese poder sepan que las mujeres estamos juntas y organizadas. Y que las chicas que han sufrido algún tipo de situación de violencia sientan que no están solas. Y no solo en nuestro ambiente sino en todos los ámbitos, fábricas, bancos, oficinas…».

«Hoy estamos re conmovidas por la unión y la fuerza que generamos juntas. Y todo lo que pase a partir de ahora, ya sea que aparezcan más denuncias o que cambie la realidad de las causas judiciales, todo lo que pase en función de esta movida nos emociona», asegura Fonzi.

Todas insisten en que falta mucho. Esto recién comienza, dicen, y se entusiasman con la fuerza que adquirieron al reunirse.

Fuente:Infobae