No Banner to display

A partir de hoy las temperaturas comenzarán a subir y alcanzarán el pico de 39°, la temperatura más alta en este inusual verano fresco en Buenos Aires. Se trata de una de las pocas olas de calor en lo que va del verano, que registró su mayor temperatura en diciembre, con 38°.

Según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), se estima que la temperatura aumentará dos grados por día, comenzando con una temperatura máxima de 33° el día de hoy y alcanzando su pico máximo de 39° el jueves.

Se define como «ola de calor» a un período en el cual las temperaturas máximas y mínimas igualan o superan ciertos umbrales, por lo menos durante 3 días consecutivos y en forma simultánea. En el caso de la ciudad porteña, esto ocurre cuando las temperaturas superan los 32,3° de máxima, y 22° de mínima.

Alerta amarilla
Desde el organismo, se activó una alerta amarilla para que «tanto la población como los organismos de protección civil puedan tomar las medidas de prevención, mitigación y de respuesta adecuadas a cada nivel de alerta».

Entre las recomendaciones de las autoridades, se aconseja aumentar el consumo de líquidos, sin esperar a tener sed, no exponerse al sol en exceso y en especial durante las horas más calurosas (11 a 17 horas), ingerir verduras y frutas evitando comer en exceso y evitando las bebidas alcohólicas o muy azucaradas, reducir la actividad física, usar ropa ligera, holgada y de colores claros, y permanecer en espacios ventilados o acondicionados.

Ante dolor de cabeza; vértigos; náuseas; confusión; convulsiones y pérdida de conciencia; piel enrojecida, caliente y seca o síntomas similares, se recomienda trasladar al afectado a la sombra y mantener su cabeza en alto mientras se intenta reducir la temperatura corporal con agua fresca.

Los niveles del Sistema de Alertas sobre Olas de Calor y Salud del SMN son cuatro y establecen un semáforo que determinan el nivel de riesgo para la población, en especial para los grupos de riesgo: bebes y chicos, mayores de 65 y personas con enfermedades crónicas.

Se diferencian por colores: verde (no hay peligro para la salud), amarillo (hay peligro porque se superaron las temperaturas máximas y mínimas de una ciudad); naranja (hay peligro especialmente para los grupos de riesgo porque la ola de calor se mantiene en el tiempo) y rojo (es muy peligroso para toda la población).

Fuente:

La Nación