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Para evitar problemas, lo mejor es asegurar las joyas del club. De esa manera construye River. Con esa idea es que el conjunto millonario trazó su ingeniería económica para retener a Franco Armani tras la disputa del Copa del Mundo de Rusia . Así, se puso en marcha una especie de blindaje para evitar que otro club le quite al guardavallas y se extendió el vínculo con Armani hasta 2022, con una cláusula de rescisión de 20 millones de dólares.
Cuando acordó su primer contrato, el futbolista de 31 años tenía una cláusula de una cifra cercana a los 8 millones de dólares para dejar la entidad de Núñez. El arreglo, ahora, consiste en que el club que pretenda contratarlo deberá pagar 15 millones de dólares más los impuestos, que equivalen a otros US$ 3.855.000.
Este mediodía Armani, antes de viajar a Barcelona con la selección de la Argentina, pasó por el estadio Monumental y se reunió con el presidente de River, Rodolfo D’Onofrio , en la oficina presidencial del primer piso. Allí formalmente sellaron el nuevo acuerdo que, de alguna manera, deja tranquilo al conjunto millonario y le permite a Armani cumplir el deseo que expresó hace unos días: «La idea es quedarme, hace poco tiempo que llegué a Argentina y a River. Tenemos que seguir con la Copa Libertadores e ir por ella».
