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Tras una temporada irregular, el Chelsea se reencontró con la gloria. Faltando tres fechas, derrotó 1-0 al West Bromwich Albion y se consagró campeón de la Premier League. En la primera temporada bajo la conducción del italiano Antonio Conte, el conjunto londinense aprovechó la falta de rodaje internacional para dominar el certamen doméstico y lograr un nuevo título.

Desde el inicio del partido, el líder salió en busca de los tres puntos consagratorios y se plantó en campo enemigo. Merodeó el área rival, haciendo circular la pelota por el perímetro, e intentó quebrar la resistencia del local con pases filtrados hacia Diego Costa o con remates lejanos.

A 15 minutos del final, Antonio Conte metió dos cambios para ver si las variantes podían romper con el empate: Willian y Michy Batshuayi reemplazaron a Eden Hazard y Pedro. Y no se equivocó. El delantero belga anotó el 1-0 a los 83 minutos tras empujar a la red un centro de César Azpilicueta.

El equipo de Conte, que armó una verdadera revolución desde su llegada a Inglaterra al cambiar el sistema de juego (apostó por una línea de tres conformada por Azpilicueta, David Luiz y Gary Cahill) e hilvanar 13 victorias en fila, podrá obtener un nuevo trofeo el próximo 27 de mayo, cuando juegue la final de la FA Cup ante el Arsenal.

Fuente: Infobae