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Ayer, un llamado al 911 encendió la alerta en la localidad de San Francisco Solano, Quilmes. Del otro lado del teléfono, una mujer desesperada denunció que su hija de 8 años había desaparecido. La madre contó que la nena había ido a comprar pan a una panadería cercana pero nunca regresó. En consecuencia, se abrió un expediente por averiguación de paradero y se puso en marcha un operativo de búsqueda.
Eventualmente, la Policía dio con un testigo que brindó un dato clave: dijo haber visto a la menor subirse a una motocicleta de color negro que manejaba un hombre, vecino del barrio, que es conocido en la zona como «El Pastor».
Así llegaron a un domicilio ubicado en la calle 822 de San Francisco Solano. La fiscal Mariana Curra Zamaniego, titular de la Unidad Fiscal de Instrucción N° 6 de Quilmes, ordenó un allanamiento de urgencia.
Cuando ingresaron durante la madrugada de este jueves, la Policía encontró a la nena durmiendo en la cama matrimonial de una las habitaciones. No estaba sola: junto con ella estaba acostado Gabriel Esteban Da Rocha, «El Pastor», de 33 años, cuyo último trabajo registrado figura en 2013 en una empresa agrícola de Entre Ríos.
En otro de los dormitorios, en tanto, encontraron a Alberto Tolaba, de 59 años, un albañil, quien estaba completamente desnudo. En el lugar también hallaron y secuestraron una escopeta tumbera junto a 25 cartuchos calibre 14 con posta de plomo.
Acorde con el reconocimiento médico, constataron que no habría sido víctima de abuso con acceso carnal, señalaron fuentes de la investigación. Pero, siempre de acuerdo al relato de ella, Da Rocha y Tolaba la habrían manoseado y golpeado en varias ocasiones con un cinturón.
Fuente: Infobae
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