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La modelo realizó una producción en Punta del Este, en donde adelantó cómo viene su año laboral y personal.

Después de un intenso 2014, el cual estuvieron mucho tiempo en el exterior porque el músico estaba de gira, Andrés Calamaro y Micaela Breque se instalaron desde diciembre en Pueblo San Vicente, cerca de La Boyita, en donde recibieron el 2015 llenos de amor y con muchos proyectos.

En una producción para la revista «Gente» de esta semana, la modelo contó que el año anterior viajó y acompañó al músico -que atraviesa un gran momento artístico- y que para este 2015 tiene como proyecto hacer teatro.

«Me gustaría hacer teatro en una sala chiquita, algo íntimo y profundo. No me importa si vienen dos personas o cien. Le voy a dar importancia a la escena y a las cosas. Voy contra la corriente. En eso soy muy salmónica», explica Micaela, que juega con el apodo de su novio, «El Salmón».

Por su parte, confesó que nunca tuvo el don de saber cantar y no podría dedicarse a la música: «No tengo rollo con el cuerpo. A mí me resulta más fácil desnudarme que cantar. Mi pudor está puesto ahí. Sería mi mayor desafío».

Por otro lado, aseguró que aún no se siente preparada para formar una familia con Calamaro. «Tener un hijo es una responsabilidad muy grande. No me siento lista. Cuento los tenga, quiero ser como mis padres fueron conmigo», aclaró y destacó el rol del cantante con su hija Charo (9 años) -fruto de su relación con la actriz Julieta Cardinali-. «Como padre, Andrés es súper piola. Obvio que no es un papá estereotipado porque no lo es como hombre. Y yo tampoco lo sería como mamá, eh».

En la galería de imágenes de esta nota compartimos la producción hot de Micaela Breque.

Fuente: Minuto Uno