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Aníbal Ibarra consideró que la denuncia de presunto encubrimiento del atentado a la AMIA -en la que ahora defiende a Cristina Fernández de Kirchner y a su exsecretario de Legal y Técnica, Carlos Zannini- «es una causa inventada para perseguir».

El exjefe de Gobierno porteño, que estará acompañado en la tarea legal por el ex juez Roberto Boico contó que decidió aceptar la misión porque son «conscientes de que es una causa política, porque no se explica desde lo jurídico sino que es una persecución política del poder judicial con jueces adeptos al poder».

«Es una causa inventada para perseguir y somos conscientes de ello. Así lo vamos a encarar. Siendo conscientes de la esencia más que el contenido de esta causa», reiteró en diálogo telefónico.

Ibarra afirmó que «lo más grave es que con esa persecución perjudicaron a personas que han perdido su libertad por el delito de encubrimiento, que es un delito menor». «Es más, no hay personas detenidos por encubrimiento en la Argentina, excepto los de está causa», sentenció.

Se refirió así a Zannini, detenido junto a Luis D’Elía en diciembre pasado por orden del juez federal de Claudio Bonadio, que investiga el presunto encubrimiento del atentado de la AMIA, ocurrido el 18 de julio de 1994 y en el que murieron 85 personas. En la misma causa está procesada CFK, quien permanece en libertad.

«Hay un acuerdo internacional que fue sancionado y avalado por una ley. Todo es un absurdo. Desde el aspecto jurídico nunca esta causa podría haber llegado hasta donde llegó, únicamente se entiende desde lo político», completó el legislador porteño con mandato cumplido.

Ibarra recordó que «en la causa Amia están [el ex juez, Juan José] Galeano, [el expresidente Carlos Saúl] Menen, Anzorreguy [Hugo, exsecretario de Inteligencia], Mullen y Barbaccia [Eamon y José, ex fiscales]; todos ellos tienen graves acusaciones, delitos graves como: peculado, malversación de fondos públicos, privación ilegal de la libertad y coacción».

«Galeano tiene 13 años de prisión; Menen, cuatro y seis años; Mullen y Barbaccia, ocho años. Y sin embargo todos están en libertad. Y está bien que estén en libertad, porque no tienen condena», indicó Ibarra.

«La persecución es evidente por eso a Cristina Fernández le pidieron el desafuero y a Zannini, -Fernando- Esteche y los estos enviaron a prisión», consideró el ex dirigente del Frepaso y la Alianza.

«Como primera medida vamos a hacer los alegatos de la sala cuarta de casación porque están pendientes de revisión los procesamientos, en el caso de ella -Cristina- con prisión preventiva y el desafuero, mientra que el caso de él -Zannini- con prisión preventiva», detalló Ibarra.

Por otro lado, el exintendente porteño confirmó: «Vamos a controlar, junto con los otros abogados de los procesados, el sorteo para ver que tribunal oral toca y así comenzar con los procesos de juicio oral».

Mientras tanto, la dupla de letrados salientes integrada por Alejandro Rúa y Graciana Peñafort quedarán como abogados en el expediente del excanciller Héctor Timerman, también procesado y detenido, hasta que dictaron su excarcelación por problemas de salud.

El fiscal del caso, Eduardo Taiano, solicitó días atrás enviar el caso a juicio oral y público con Fernández de Kirchner, Timerman y Zannini, entre los acusados. El pedido también alcanza al dirigente Luis D´Elía, al ex líder de Quebracho Fernando Esteche y al representante de la comunidad islámica en el país Jorge Khalil, quienes se encuentran con prisión preventiva; y al ex titular de la AFI Oscar Parrilli, al diputado Andrés Larroque, al ex vicecanciller Héctor Zuain; a la ex procuradora del Tesoro Angelina Abbona y al supuesto espía Allan Bogado.

Fuente: Perfil